La Jornada 25 de octubre de 1997

El PRI no protegerá impunidades: Aguilera

Humberto Ortiz Moreno Ť Los líderes de las fracciones de PRD, PRI y PAN en la Asamblea Legislativa del Distrito Federal conocieron con sorpresa, indignación y preocupación la información publicada por La Jornada acerca de las declaraciones ministeriales de los Zorros que participaron en la balacera de la colonia Buenos Aires, pues dijeron sentirse engañados con las entrevistas públicas y privadas que han sostenido con el procurador Lorenzo Thomas y el general Enrique Salgado.

Pugnaron porque la investigación trascienda a la próxima administración de gobierno y genere evidencias que muestren la responsabilidad de encubrimiento, conspiración y complicidades de quienes resulten involucrados. Advirtieron que bajo ningún concepto podrán heredarse culpas por actos realizados en una gestión gubernamental ni aplicarse borrón y cuenta nueva.

El presidente de la Comisión de Gobierno de la Asamblea Legislativa del Distrito Federal, Martí Batrés Guadarrama, juzgó que el asunto de fondo es la desarticulación que priva en los cuerpos policiacos y la corrupción en los núcleos encargados de la seguridad pública, independientemente de quiénes sean los mandos. ``No podemos irnos con la finta'' de que estos fenómenos tienen su origen en la regencia de Oscar Espinosa, subrayó.

El coordinador priísta Manuel Aguilera Gómez garantizó que el Revolucionario Institucional no será protector de impunidades, así sean funcionarios de su partido los responsables, y se manifestó porque los culpables ``sean presentados ante la justicia y castigados con el rigor suficiente'' por cometer actos tan ``imperdonables''.

Falra aclarar, externó escéptico, si los restos encontrados en el Ajusco y Tláhuac son de los muchachos de la Buenos Aires y por qué ``de repente'' aparecen partes humanas adicionales, sin ningún rastro ni género, en el propio sitio, ``dando la impresión de que fueron deliberadamente sembrados.''

Si bien rechazaron una eventual remoción de Salgado Cordero de la Secretaría de Seguridad Pública, pues ``no resolvería nada'' y sólo descontrolaría la función de seguridad pública, los legisladores de los tres partidos de mayor representación en la ALDF reclamaron que el gobierno de Espinosa esclarezca el caso antes del 5 de diciembre.

Y para insistir en que los responsables sean castigados, los diputados locales que integran la comisión de seguimiento se reunirán la semana entrante con el procurador de Justicia Lorenzo Thomas para externarle una interrogante de fondo aún vigente: ¿Quién dio las órdenes a los policías?

Los diputados se enteraron con malestar de las declaraciones ministeriales -difundidas en La Jornada- de los policías involucrados en los sucesos del 8 de septiembre en la colonia Buenos Aires, porque nadie les informó sobre la intervención de grupos secretos en el operativo y tales revelaciones manifiestan la descomposición interna de las policías.

El panista Miguel Hernández Labastida recordó que tanto Thomas como Salgado comentaron que aparte del vehículo que pasaba por la zona de la balacera había otros policías vestidos de civil que iban en moto y supuestamente eran jaguares, uno de los cuales murió, otro está herido y uno más detenido, quienes pidieron la ayuda por radio. ``No había, nos dijeron, ningún servicio especial. Nos dijeron varias mentiras'', deploró .

Renovó la exigencia del PAN de que la SSP ponga a disposición de la autoridad investigadora a todos los elementos que intervinieron en los hechos para que la Procuraduría General de Justicia del Distrito Federal tenga bases de investigación a fondo, y por ningún motivo ``se piense en chivos expiatorios ni en eliminación de posibles culpables''.

Subrayó que si no hay elementos de avance en las indagatorias, la comisión de seguimiento ``tendrá que solicitar otra plática con la procuraduría'', lo que ocurriría la semana entrante, porque ``o no saben o no quieren dar a conocer sus resultados.''

El perredista Batres dijo que la investigación es hasta ahora insatisfactoria e increíble. Afirmó que no está a discusión el fracaso o no de mandos militares en la policía, sino la corrupción en diversos núcleos de seguridad que no es nueva ni se ha generado en los tres años de gobierno de Espinosa Villarreal.

Responsabilizó a anteriores regentes y destacó que el general Salgado ``todavía tiene mucho que decir y esperamos que lo diga, porque esta administración es la que tiene que responder...''

Aguilera Gómez opinó que la información publicada en La Jornada ``sorprende pero no aparece en ninguna de las investigaciones'' ni en las declaraciones que, en público y en privado, han vertido el procurador Thomas y el general Salgado.

Opinó que, sin juzgar a los mandos militares, no ha tenido éxito la función preventiva contra la delincuencia. Reclamó un titular de la SSP que sea policía de carrera.

Y expuso preguntas que aún quedan en el aire y que son puntos clave en la averiguación: ¿qué pasó entre el momento en que fueron detenidos los muchachos de la Buenos Aires y el momento en que son ejecutados? ¿Los llevaron a una estación policiaca? ¿Qué pasó con eso de que me enojo y como resultado de mi ira actúo, me calmo y conforme va transcurriendo el tiempo la gente se va serenando...?