Democratización y cambio económico deben ir a la par: el perredista

Arturo Cano Ť El PRD y el PAN presentarán al presidente Ernesto Zedillo una propuesta para avanzar en la democratización del país y llevar a cabo reformas económicas, comenzando por la discusión transparente del presupuesto público con la participación de la sociedad, dijo Andrés Manuel López Obrador, presidente del Partido de la Revolución Democrática.

Para cerrar el paso a quienes pretenden dar marcha atrás en el tránsito a la democracia, sostuvo el líder en entrevista con La Jornada, se requiere de un consenso que parta de dos ejes inseparables: ``Es necesario que el avance en la democratización del país y la reforma económica se den al mismo tiempo''. En ambos temas, señaló, encontró coincidencias con su homólogo del Partido Acción Nacional, Felipe Calderón Hinojosa, durante la reunión que sostuvieron el pasado martes.

En el terreno político, agregó López Obrador, se trata de profundizar los cambios para impedir ``afanes autoritarios'' y cerrar el paso a quienes están por frenar el avance democrático alcanzado hasta ahora: ``Esto es, por ejemplo, rechazar el experimento Tabasco de defraudación electoral, de utilización de los recursos del gobierno para apoyar al PRI y a sus candidatos. Se trata de no permitir que eso se extienda y se convierta en un modelo alternativo ante la crisis del régimen''.

En materia económica, destacó la coincidencia entre los dos mayores partidos de oposición respecto de la reducción del impuesto al valor agregado y dijo que puede haber acuerdos en otros puntos como un impuesto sobre la renta progresivo y la desaparición del impuesto al activo de las empresas.

Entrevistado en un día de apretada agenda, que incluyó un viaje a Tabasco para levantar ánimos y contener pasiones, una reunión con legisladores que prepararan la discusión del presupuesto y otra con empresarios encabezados por Eduardo Bours, López Obrador se refirió a las posibles discrepancias con el PAN: ``Es cosa de ponerlas sobre la mesa, como la propuesta de nosotros de un incremento al salario real de los trabajadores, además de otra serie de acciones para mejorar las condiciones de vida de la población''.

El dirigente perredista sostuvo que los dos partidos opositores deben actuar con madurez para evitar una ruptura en la Cámara de Diputados en torno al tema del presupuesto.

--¿Considera que la reforma política y los cambios económicos son indisolubles, si se pretende alcanzar un consenso nacional?

--Es necesario que el avance en la democratización del país y la reforma económica se den al mismo tiempo. Hay experiencias en ese sentido. Cuando se pacta en España la transición a la democracia, se pacta también un programa económico que incluye una reforma fiscal integral, apoyos directos y aumentos, con rango constitucional, a salarios y pensiones. El planteamiento es que todo esto salga por consenso. Porque en los últimos días se advierte cierta proclividad, al interior del gobierno y del PRI, a dar marcha atrás en lo alcanzado y no permitir que se siga avanzando en materia de desarrollo social y político.

--¿Cuáles serían los mecanismos para alcanzar ese consenso?

--El planteamiento que se está haciendo, al que todavía hace falta afinar detalles, es convocar a una discusión de todos, incluido desde luego el gobierno, transparentando estos temas, es decir, que la sociedad conozca las propuestas que se van a hacer y que participe en toda la discusión, en el entendido de que estamos frente a una sociedad madura que exige mayor participación. Esta es una propuesta que le hice a Felipe Calderón y que inicialmente aceptó.

Un consenso nacional tendría que pasar, de acuerdo con el líder perredista, por ``desmitificar'' temas como la economía, para que los ciudadanos sepan más sobre la orientación del presupuesto: ``Cómo y a cuáles sectores se va a distribuir, además de aclarar muy bien los subsidios a bancos y empresas constructoras. Son temas que deben ser discutidos a profundidad, pero sobre todo de manera transparente y con la participación de la sociedad''.

--Felipe Calderón habla de resistencias autoritarias. Usted de un grupo de gobernadores que se opone al cambio. PAN y PRD no quieren hablar con el secretario de Gobernación. ¿Cómo y con quiénes se alcanzará este consenso nacional?

--Vamos a hacer esta propuesta directamente al Presidente de la República y a otros actores de la vida pública del país.

--¿Cuándo?

--No quisiera adelantar otras consideraciones, porque está en una fase inicial.

--Un desacuerdo con el PAN en la Cámara de Diputados, ¿pondría en riesgo la búsqueda de este consenso nacional?

--Se está buscando la manera de evitar rupturas, de actuar con mucha madurez y responsabilidad, de cara a la sociedad, sin que los partidos hagan a un lado sus principios ni sus programas de acción, pensando en todo momento en los intereses generales de la nación.

--De no prosperar esta idea, ¿se desatarán los ``extremismos políticos''?

--En el caso del PRD, siempre vamos a actuar con mucha responsabilidad, como lo hemos demostrado. Creo que uno de los elementos nuevos a considerar es que el PRI ha dejado de ser factor de estabilidad política. Ya no pueden ufanarse de que la paz social depende del partido oficial. Ahora la estabilidad política depende de nosotros, y quienes están tensando el ambiente son ellos, mientras nosotros actuamos con mucha responsabilidad, porque estamos cumpliendo con el compromiso de transitar a la democracia por el camino de la concordia. Desde luego, no vamos a dejar de ejercer nuestro derecho a disentir ni abandonaremos nuestros compromisos con el pueblo, sobre todo en materia de política económica. Insisto, hay puntos fundamentales para el PRD: el incremento salarial a los trabajadores, el impulso a las actividades productivas y garantizar mejores condiciones en educación, salud y vivienda. Nuestro compromiso de frenar el empobrecimiento del pueblo y de impulsar un programa de recuperación para que el país salga de la crisis de bienestar social, es un compromiso ineludible y no está sujeto a negociación.