Descargan tráiler con víveres en casa de un funcionario en Acapulco
Matilde Pérez U., enviada, Acapulco, 18 de octubre Las mantas Acapulco está de pie empezaron a colocarse sobre la costera Miguel Alemán en la zona hotelera de este centro turístico, mientras que en las colonias populares afectadas por el huracán sigue el clamor: agua, queremos agua.
En tanto, las comunidades indígenas de Coyuca de Benítez, Ayutla y San Luis Acatlán, afectadas por el huracán Paulina, siguen sumidas en el olvido, aseguraron sus respectivos presidentes municipales. Las condiciones son dramáticas, dijo Odilón Romero Gutiérrez y resumió: 54 de las 104 comunidades de Ayutla están incomunicadas; es decir, que 40 por ciento de los mixtecos y tlapanecos carecen de alimentos, agua y cobijo. Hasta ayer se habían contabilizado mil 200 viviendas destruidas.
En la colonia Santa Cecilia los acapulqueños rechazan
la ayuda de gobierno y se organizan para reconstruir
sus casas y calles. Foto: Duilio Rodríguez
A San Luis Acatlán sólo han llegado dos helicópteros con 250 despensas para tres mil damnificados. Primero la sequía y después el huracán destruyeron las 14 mil hectáreas sembradas de maíz; sus pobladores también carecerán de frijol, ya que se perdieron mil 500 toneladas del cultivo. Algunos caminos rurales desaparecieron.
En Coyuca de Benítez el panorama es desolador, dijo el alcalde José Luis de la Cruz. Se han contabilizado 20 muertos y la comunidad Valle de Río está aislada, el embarcadero prácticamente desapareció, la infraestructura urbana está deteriorada. Con esos datos, los munícipes trataron de revelar la desesperación y aislamiento de cientos de familias, por lo que pidieron a la Comisión de Asuntos Indígenas de la Cámara de Diputados que de inmediato recorra las regiones dañadas por el huracán y establezca un programa emergente de apoyo para sus pobladores.
Uno de los cuatro tráileres que transportaban alimentos, agua y ropa para los damnificados, fue descargado en la casa de Guillermo López García, secretario de Desarrollo Urbano y Obras Públicas de gobierno del estado, denunció uno de los choferes, quien solicitó guardar el anonimato. ``Pasamos sin pagar la caseta de la autopista por traer la manta de ayuda, pero uno de los vehículos fue desviado al domicilio particular del funcionario, quien aseguró que eso se entregaría a sus seguidores'', dijo.
Mientras, en la colonia Santa Cruz, Samuel Vicente Lainas -quien dijo trabajar en la secretaría de Ecología del gobierno estatal- fingió no ver el pago de tres dólares que hacía uno de los 20 damnificados a quienes por lista se les entregaban dos docenas de polines y dos paquetes de láminas de cartón para construir una vivienda provisional. El material estaba almacenado en una casa particular y, según el trabajador estatal, en dos o tres días se entregará a los damnificados de la colonia El Líder.