La Jornada 18 de octubre de 1997

Diálogo, no imposición en el presupuesto: Zedillo

Rosa Elvira Vargas Ť A unas semanas de que presente a la Cámara de Diputados su proyecto de presupuesto de egresos para 1998, el presidente Ernesto Zedillo insistió ayer en que su gobierno está convencido de que ``vamos por el camino correcto'' en el terreno económico. No obstante, aclaró que no trata de imponer unilateralmente sus puntos de vista. ``Deseamos escuchar las opiniones y propuestas de todos para que todos nos comprometamos con igual decisión'', dijo.

En la apertura de la Sexta Reunión Nacional Económica organizada por la Confederación de Trabajadores de México (CTM), el Ejecutivo insistió en su llamado a formular una política económica de Estado, para lo cual, dijo, ha pedido responsabilidad a las fuerzas políticas y a las organizaciones sociales para dejar atrás ideas preconcebidas, enconos y dogmas ideológicos.

Desde su perspectiva, sólo el crecimiento permitirá disponer de los recursos necesarios para superar los ``graves problemas de desarrollo'' que hacen lamentar tragedias como la ocurrida en Oaxaca y Guerrero.

Explicó que el crecimiento para la justicia que propone su administración requiere un esfuerzo arduo y de muchos años en todos los sectores productivos. ``No es un camino rápido, pero sí es un camino seguro''.

En el auditorio Vicente Lombardo Toledano de la CTM y ante la cúpula del sector obrero, Ernesto Zedillo admitió que el país enfrenta problemas que se han agravado como resultado de un crecimiento económico insuficiente durante los últimos 25 años.

Expuso que el hacinamiento en las ciudades, los asentamientos irregulares y la pobreza son fenómenos que aquejan a una parte importante de la población y que todo ello podrá enfrentarse con eficacia sólo si la economía crece suficiente y sostenidamente, pues únicamente así podrán crearse más empleos mejor remunerados y generar más recursos para fortalecer las políticas de apoyo social.

Por ello, insistió, ``es fundamental que nos pongamos de acuerdo en la importancia de lograr un crecimiento duradero; es fundamental hacerlo porque el crecimiento es el único camino seguro para hacer realidad la justicia social''.

Al iniciar su mensaje --luego de corregir al maestro de ceremonias, que lo presentó como presidente ``de los Estados Unidos'' y omitió ``Mexicanos''--, Zedillo dijo que hay que afianzar lo logrado, ``pero siempre seguir avanzando. No estaremos satisfechos --continuó-- mientras el crecimiento económico no llegue a donde adquiere su sentido profundo: a las mesas de las familias, a los bolsillos de los trabajadores''.

Hoy, agregó, la economía está preparada para iniciar una época de crecimiento vigoroso y perdurable. Lo que ahora se necesita es un acuerdo para consolidar ese crecimiento, no porque éste sea un fin en sí mismo, sino porque es la única manera de conseguir lo que más importa: generar empleos y bienestar.