La Jornada 8 de octubre de 1997

Dividen a diputados del tricolor las propuestas de reducir IVA e ISR

Georgina Saldierna y Ciro Pérez Ť Las diferencias y los ``jaloneos'' en el interior del grupo parlamentario del PRI han impedido que la propuesta económica de este partido alcance consenso entre los propios priístas. Mientras tanto, las bancadas de PAN y PRD han tomado la iniciativa y ya entregaron a la Secretaría de Hacienda y Crédito Público sus planteamientos sobre el tema.

Los puntos que han dividido a la fracción del partido oficial son, entre otros, la reducción del IVA y del impuesto sobre la renta, además de la modificación del impuesto del 2 por ciento al activo de las empresas y la gravación al capital en inversiones de corto plazo.

Sin embargo, han empezado a filtrarse algunos datos del planteamiento que presentarán los priístas. De ellos destaca el reconocimiento de que para el próximo año necesariamente se tendrá que operar con un déficit público financiable de 1.25 por ciento del producto interno bruto (PIB).

Guillermo Barnés, secretario de la Comisión de Programación y Presupuesto de la Cámara de Diputados, informó que con un déficit de este monto se busca que la proporción entre endeudamiento y crecimiento se mantenga constante, porque los ``mexicanos ya no queremos endeudarnos más''.

El legislador fue entrevistado luego de quedar instalada la Comisión de Hacienda y Crédito Público, en donde su presidente, el priísta Angel Aceves Saucedo, dio a conocer que entre el 3 y el 4 de noviembre próximo el Ejecutivo enviará a la Cámara de Diputados la Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos de la Federación.

Barnés García explicó que la fracción priísta ha hecho análisis macroeconómicos y de lo que están seguros es que debe haber un déficit público financiable del 1.25 por ciento del PIB, por los gastos en seguridad social que tendrán que hacerse.

Resaltó que el PRI no va a salir con la idea de que debe haber equilibrio económico, pero sí que el déficit tiene que ser financiable de manera sana, razonable y creíble. Resaltó incluso que en el presupuesto gubernamental del presente año no estaba planteado terminar sin déficit, el cual se calcula que se ubicará en medio punto del PIB.

Otros datos de la propuesta económica priísta que se han filtrado a la prensa son: el planteamiento de que la economía debe llegar a 5 por ciento, que la inflación tendrá que ubicarse entre 10 y 12 por ciento, la creación de un millón de empleos y la recuperación real del salario. Todo ello basado sobre el supuesto de que el precio del petróleo se ubicará en 14.50 doláres por barril.

Los priístas han puntualizado que lo importante del nuevo presupuesto no debe ser reducir la inflación, sino crear empleos y lograr el crecimiento de la economía.

Sostienen reuniones legisladores y autoridades hacendarias

Mientras tanto, el secretario de Hacienda Guillermo Ortiz Martínez y subsecretarios de la misma dependencia iniciaron contactos con los diputados integrantes de las comisiones de Programación y Presupuesto, Hacienda y Crédito Público, y Vigilancia de la Contaduría Mayor de Hacienda.

De acuerdo con versiones de los legisladores de la oposición, en dichos encuentros se acordó hacer un análisis de las variables macroeconómicas para, en función de ello, determinar cuáles son las que pueden moverse para hacer más eficiente el gasto programable.

Además, surgió el planteamiento de que tanto los diputados como los funcionarios seguirán reuniéndose para discutir el presupuesto sin dogmatismo y anulando las posiciones irreductibles. Ello con el propósito de hacer un presupuesto confiable.

En lo general, los legisladores de oposición han insistido en sus propuestas para aumentar el empleo, evitar la duplicidad de funciones en las dependencias gubernamentales, cancelar las partidas secretas y transparentar el rubro 23 del presupuesto --referido a las contingencias--, así como acabar con los programas de rescate financiero, atacar la corrupción de manera frontal y reducir los gastos innecesarios y suntuarios.