La Jornada 25 de septiembre de 1997

Se agrava la crisis en San Lázaro por la pugna de comisiones

Ciro Pérez Silva, Oscar Camacho Guzmán y Roberto Garduño Ť La rebatiña entre los grupos parlamentarios representados en la Cámara de Diputados por las 59 comisiones y comités, ha generado al interior de todas las bancadas una ``crisis'' que se agrava conforme transcurre el tiempo y las negociaciones para repartirlas no arrojan resultados y amenazan romperse.

Ayer el bloque opositor presentó una nueva propuesta que el PRI calificó como un ``golpe bajo'' y de plano la rechazó.

La propuesta plantea entregar al PRI 27 comisiones, conocidas en el bloque opositor como las comisiones ``patito'', en tanto que PRD y PAN se adjudican 14 ``de las más importantes'' cada uno, ceden dos al PT e igual cantidad al PVEM.

Los negociadores priístas, Ricardo Monreal Avila y Fidel Herrera Beltrán, señalaron que ``en el ánimo de mantener las negociaciones'', aceptan 22 de las comisiones que ``generosamente'' las oposiciones les asignaron. Y de las 28 que en conjunto escogieron PAN y PRD, dijeron los priístas, ``les reconocemos 22'', de tal suerte que ``cedan ellos y cedamos nosotros, que dejen atrás las posiciones irreductibles que vienen manejando y lleguemos a un acuerdo por consenso''.

Aunque Monreal y Herrera no admitieron la posibilidad de que con esta nueva propuesta se rompan las negociaciones, ya prevén llegar al pleno el próximo martes, fecha límite para integrar las comisiones, con el fin de que en la sesión correspondiente se vote dicha propuesta.

Cuestionaron la integración que se pretende dar a las comisiones, ya que a pesar de que el bloque propuso que estuvieran compuestas por un máximo de 30 diputados, ahora decidieron reducir este número hasta 15 en algunas comisiones. ``Lo hacen porque con sus diputados no alcanzan a cubrir el máximo que ellos mismos propusieron, mientras que a los priístas los marginan de su derecho y obligación legal de participar en comisiones''.

Sólo 500 lugares al PRI

Con el esquema que propone el bloque, los priístas ocuparían poco más de 500 espacios de más de 700 a los que tendrían derecho.

En esta lógica, y de no lograrse un consenso antes de la sesión del martes 30 de septiembre, corresponderían al PRI las comisiones de Artesanías, Asentamientos Humanos y Obras Públicas, Asuntos Hidráulicos, Asuntos de la Frontera Sur, Asuntos Indígenas, Asuntos de la Nacionalidad, Bosques y Selvas, Comunicaciones y Transportes, Corrección y Estilo, Defensa Nacional, Deporte, Desarrollo Regional y Apoyo a la Producción, Distribución y Manejo de Bienes de Consumo y Servicios.

Además, Fortalecimiento del Federalismo, Hacienda y Crédito Público, Información, Gestoría y Quejas, Justicia, Marina, Pesca, Pensionados y Jubilados, Reforma Agraria, Reglamento y Prácticas Parlamentarias, Relaciones Exteriores, Trabajo y Previsión Social y las comisiones de seguimiento de las investigaciones de los casos Colosio y Ruiz Massieu, y los comités de Biblioteca e Informática y de Asuntos Editoriales.

Al PRD le correspondería presidir Agricultura, Asuntos Fronterizos del Norte, Cultura, Derechos Humanos, Desarrollo Social, Distrito Federal, Educación, Energéticos, Programación, Presupuesto y Cuenta Pública, Salud, Seguridad Social, Seguridad Pública y los comités de Comunicación Social y el Instituto de Investigaciones Legislativas.

En tanto, el PAN encabezaría Atención a Discapacitados, Ciencia y Tecnología, Comercio, Fomento Cooperativo, Fortalecimiento Municipal, Ganadería, Gobernación y Puntos Constitucionales, Patrimonio y Fomento Industrial, Población y Desarrollo, Turismo, Radio, Televisión y Cinematografía, Vigilancia de la Contaduría Mayor de Hacienda y los comités de Administración y Asuntos Internacionales.

Al PVEM plantean asignarle Ecología y Medio Ambiente, y Asuntos de la Juventud. Y el PT presidiría Vivienda y Participación Ciudadana.

Rebeliones internas

En el PRI, con 239 diputados, la ``crisis'' ha sido calificada como ``una verdadera rebelión interna'', toda vez que no habrá presidencias de comisión ni secretarías suficientes para satisfacer la demanda. Todos los interesados en alguna comisión específica han hecho sentir su desacuerdo cuando los negociadores han tenido que cederla para ``destrabar'' las pláticas y llegar a un acuerdo.

No escapa a estas manifestaciones de inconformidad el PRD. El pasado martes, el Comité Ejecutivo Nacional pidió al coordinador de la diputación perredista, Porfirio Muñoz Ledo, que no deje en manos del PAN la Comisión de Educación, y en una carta, más de 14 diputados encabezados por Lázaro Cárdenas Batel, lamentan que en las negociaciones quedara ``fuera de las preferencias'' de su grupo parlamentario la Comisión de Asuntos Indígenas, calificando la actitud de los negociadores, Pablo Gómez y Jesús Martín del Campo, de ``incongruencia política''.

Suscrito por diputadas y diputados interesados en participar en dicha comisión, el documento establece la preocupación de estos legisladores porque ``esa actitud'' de sus coordinadores ``pueda proyectar una imagen que lo haga aparecer como un partido que sólo utiliza a nuestros pueblos indígenas para adornar discursos y tomarlos como bandera política en los procesos electorales, para luego dejarlos fuera de sus prioridades en las actividades parlamentarias, ya que por lo que se puede apreciar, nuestro partido (PRD) no ha dado la suficiente pelea para defender esta comisión, dejándola hoy en manos del PRI''.

Las pugnas internas en el PAN siguen caminos similares. Al iniciar la primera de las hasta ahora 12 reuniones para ``destrabar'' el reparto, los panistas habían manifestado que no buscarían ninguna comisión de las tres que conforman el bloque económico. Sin embargo, la inconformidad de miembros de su bancada por esta decisión hizo que ahora el PAN exija presidir, por lo menos, la Comisión de Vigilancia de la Contaduría Mayor de Hacienda.