La Jornada 29 de agosto de 1997

650 DEPORTADOS POR LA OPERACION RIO GRANDE

De los corresponsales Ť A cuatro días de haber comenzado la Operación Río Grande en la frontera de Texas con Tamaulipas, la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos deportó a más de 650 indocumentados por los tres puentes internacionales que comunican a Brownsville con Matamoros, y el flujo de migrantes se redujo hasta en 80 por ciento, aseguró ayer Ernie Castillo, jefe de la corporación en esa ciudad vecina.

Castillo, también vocero del Servicio de Inmigración y Naturalización (SIN), dijo que las personas que burlaron la vigilancia fueron detenidas en el centro de Brownsville. Del lado mexicano, grupos de diversos estados se apostaron en las inmediaciones del río Bravo, con el fin de buscar el momento para cruzar la frontera natural.

Berenice Rendón Talavera, cónsul en Brownsville, dijo que la Operación Río Grande se contrapone al espíritu de la Declaración Conjunta de Protección de los Migrantes en la Zona Fronteriza, firmada por los presidentes Bill Clinton y Ernesto Zedillo el 6 de mayo de 1997, con el fin de establecer compromisos para la administración respetuosa en los asuntos relacionados con la inmigración.


Supervisión en La Cruz, lugar donde los migrantes
acostumbraban a llegar por el Nido de las Aguilas
y donde la Patrulla Fronteriza no tenía acceso.
Foto: Elsa Medina

En la capital de Tamaulipas, el presidente de la Comisión de Derechos Humanos del Congreso local, el perredista Laurencio García, hizo un llamado a las organizaciones no gubernamentales a integrar un frente que atienda las demandas de los migrantes en la franja fronteriza.

En Laredo, el director general de la Patrulla Fronteriza, Douglas M. Krump, hizo una visita para constatar la marcha del operativo, y aseguró que será una estrategia a realizar durante varios años. Anunció que el sector recibirá 49 agentes más con el objetivo de reforzar la vigilancia en furgones y patios de ferrocarril.

Gustavo de la Piña, quien sucederá a Krump a partir de enero, calificó de ``innecesarios'' el envío de 10 mil nuevos agentes de esa corporación a la frontera con México y el reforzamiento de la vigilancia con personal militar para combatir el tráfico de indocumentados, como exigen algunos legisladores estadunidenses.

Sobre la propuesta de destinar 50 millones de dólares anuales para los nuevos agentes, Antonio Carmona, coordinador del Grupo Plural Piedras Negras, en Coahuila, opinó que esos fondos podrían generar 10 mil empleos al año en maquiladoras fronterizas, lo que frenaría la migración ilegal y, lejos de convertirse en una afrenta, sería un verdadero gesto de buena voluntad que además le permitiría al erario estadunidense recuperar la inversión.

Fallece un mexicano en El Paso

Un migrante falleció en la carretera interestatal 10 de El Paso, Texas, al ser atropellado por un auto que era manejado a más de 100 kilómetros por hora. La víctima fue identificada como Patricio Valderrama, de 30 años, y según la versión de la policía del condado, el accidente se debió a que el indocumentado, acompañado por otras tres personas, se le atravesó al auto en una vía de alta velocidad.

Por otra parte, después de permanecer 14 meses en prisión en Los Angeles, California, el sinaloense Fernando Covarrubias Varela fue dejado en libertad el miércoles por una juez de esa ciudad. Covarrubias fue acusado de conducir el vehículo donde murieron siete indocumentados en una volcadura ocurrida durante una persecución, el 8 de abril de 1996, en el poblado Riverside. (Armando Torres Barbosa, Martín Sánchez, Carlos Figueroa, Jorge Cornejo, Efraín Klerigan, Rubén Villalpando y Víctor Guerra)