Exige la IP mantener la disciplina financiera; la estrategia aún es ``vulnerable'', advierte
Humberto Ortiz Moreno Ť El sector patronal demandó al presidente Ernesto Zedillo no relajar la disciplina económica y financiera para privilegiar el debate político con los partidos, porque a la mitad del sexenio la estrategia aún presenta ``vulnerabilidades potenciales'' y el gasto social ha sido insuficiente para evitar la acentuación de las desigualdades en el crecimiento.
``No es fácil recuperar 26 años de inflación y 15 de estancamiento'', advirtió el presidente de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), Gerardo Aranda Orozco.
Observó que la inversión extranjera directa continúa representando un tercio del monto total registrado, lo que mantiene un elevado grado de vulnerabilidad en el crecimiento económico.
Consideró que el sistema de economía de mercado funciona parcialmente en México y se manifestó por profundizar la desincorporación de paraestatales, fortalecer la supervisión de instituciones, corregir la iniquidad en la distribución del ingreso y crear las condiciones para que el multipartidismo del Congreso no se contraponga a las prioridades generales de la nación.
Juzgó que un país cuya economía no puede satisfacer en forma total las necesidades básicas de su población, ``en lo económico todavía no alcanza el éxito''.
En rueda de prensa, calificó de ``normalitos'' los posibles cambios en el gabinete, y opinó que no constituirían ninguna regresión ni sorpresa si es que el presidente Zedillo considera que pueden consolidar los avances en su administración. ``Pero si seguimos dependiendo de los hombres y los nombres para marcar el paso del país atrasaríamos el desarrollo'', previno.
Gasto social insuficiente
Aranda Orozco presentó a los reporteros un extenso documento donde, bajo el título México a la mitad del sexenio, la Coparmex analiza los avances y retos actuales.
En la parte social el líder patronal consideró imperativo expresar los avances macroeconómicos en más y mejores servicios, mayor número de empleos, mejoría de las empresas, salarios superiores y, en suma, mayor bienestar para la población.
Aseveró que en los servicios que presta el gobierno persisten serios retrasos. Aunque la educación tiene la mayor cobertura nacional, principalmente en nivel básico, prevalece una tasa de analfabetismo que en personas mayores de 15 años asciende a 12 por ciento, mientras 14 por ciento de niños de entre 6 y 14 años carece de oportunidades para asistir a la escuela.
Asimismo, sólo 50 por ciento de la población tiene acceso a sistemas de seguridad social, del cual 3.7 por ciento corresponde al medio rural.
Si bien en la actualidad 50 por ciento del presupuesto programable del gobierno está destinado a programas de desarrollo social, el monto es insuficiente para evitar la acentuación de las desigualdades sociales y para que continúe el crecimiento del número de personas que no puede acceder a los servicios elementales de bienestar.
Puntualizó: ``Si queremos ser eficaces en este rubro, el gobierno debería optar por políticas de desarrollo social a mediano y largo plazo, que traspasen las líneas sexenales. El reto es enorme y sabemos que no será abatido en la presente administración, pero es tiempo de poner las bases de un programa que en el largo plazo logre aminorar las desigualdades...''.