Capturan ``por error'' al que fue defensor de El señor de los cielos Agentes soslayaron el amparo de Sergio Aguilar; ya está libre

Juan Manuel Venegas Ť La PGR ``no respetó'' una suspensión provisional de arresto que protegía a Sergio Aguilar Hernández -abogado de Amado Carrillo Fuentes- y sus agentes antinarcóticos lo detuvieron la madrugada del miércoles para llevarlo al Reclusorio Norte, y todo para que el juez Alberto Pérez Dayán, apenas reconociera el error de la PGR, lo dejara en libertad.

Aguilar Hernández fue detenido desde el 24 de junio. A partir de esa fecha estuvo bajo vigilancia de la fiscalía de delitos contra la salud, que incluso logró una orden de arraigo domiciliario y el Ministerio Público lo interrogó cuantas veces quiso durante estos dos meses.

Se especuló mucho sobre su consignación y Mariano Herrán Salvatti, fiscal antinarcóticos, lo acusó de pertenecer a una red de abogados dedicados a dar protección jurídica al cártel de Juárez, incluso para encubrir operaciones de lavado de dinero.

Pero todo esto se vino abajo. En este tiempo, los abogados de Aguilar Hernández tramitaron la protección de la justicia federal, logrando que el viernes 15 de agosto, la juez primero de Distrito del estado de México, María del Carmen Pérez Cervantes, le concediera una suspensión provisional a efecto de que no se privara de su libertad a Aguilar Hernández y otros dos coacusados, su hermana Hilda Hernández y Salvador Flores González.

Esa suspensión provisional entró en vigor a partir del sábado 16 del mes en curso, mismo día en que la PGR obtuvo del juez quinto de distrito en materia penal del Reclusorio Norte, Alberto Pérez Dayán, la orden de aprehensión contra el abogado del fallecido Señor de los cielos, presunto responsable de los delitos de cohecho y posesión de cocaína.

Pérez Dayán argumentó ayer que él giró la orden de aprehensión porque el juzgado del estado de México no le notificó la expedición de la suspensión provisional y dijo que desconocía por qué los agentes federales de la PGR realizaron la aprehensión de Aguilar Hernández, a pesar de la protección judicial de que gozaba.

En efecto, desde que la juez de Distrito mexiquense emitió la suspensión provisional, pasaron tres días y en la madrugada de este miércoles, por instrucciones del teniente coronel Juan Edgardo Cedillo González -encargado de la Dirección General de la Policía Judicial Federal Antidrogas-, Aguilar Hernández fue aprehendido, sacado de su domicilio y trasladado al reclusorio.

Según su abogado, Rubén Tamayo Viveros, pasadas las 24 horas del martes los agentes antinarcóticos llegaron al domicilio de su cliente ``y a pesar de que les fue exhibido el documento que acreditaba la suspensión provisional contra la orden de aprehensión, hicieron caso omiso'' y lo trasladaron a prisión.

De acuerdo con lo asentado ante el juez Pérez Dayán, los agentes de la PGR manifestaron ``que por órdenes superiores no iban a hacer caso de ese amparo''.

Por su parte, los familiares de Aguilar Hernández, en declaraciones a la prensa, indicaron que los agentes ``actuaron con lujo de violencia, no respetaron la orden judicial y hasta amenazaron con una pistola'' a una de sus hermanas, a la que le arrebataron el documento (la suspensión provisional) y lo tiraron al suelo, diciendo que eso a ellos no les importaba y que ``tenían órdenes de llevarse a Sergio a prisión''.

Todo lo anterior obligó a Pérez Dayán a ofrecer una explicación a los defensores de Aguilar Hernández, y a reconocer que ``fue un error'' no atribuible a él su aprehensión, sino a la PGR.

El arraigo quedó sin efecto

Con estos errores o apresuramiento en la consignación del abogado de Carrillo Fuentes, y por la orden de aprehensión girada y que finalmente no sirvió a los objetivos de la PGR, hasta el arraigo al que estaba sometido quedó sin efecto.

Todavía por la tarde, mientras en el juzgado quinto del Reclusorio Norte se ordenaba la libertad de Aguilar Hernández, la PGR emitió un comunicado dando cuenta de que sus agentes habían cumplimentado la orden de aprehensión en contra del abogado del Señor de los cielos, acusado de los delitos de cohecho y posesión de cocaína.