Condena México que EU aliente el rearme
David Aponte Ť La posición de México en la 11 Reunión del Grupo de Río será de rechazo al levantamiento del embargo sobre venta de armas adoptado por Estados Unidos, ``decisión unilateral'' que podría alterar los equilibrios y conducir a una ``escalada de adquisición de armamento en la región'', dijo ayer el canciller José Angel Gurría.
Las diferentes etapas de la historia han demostrado que la venta de armamento sólo genera desequilibrios, incertidumbres y tensiones entre las naciones latinoamericanas. Por esa razón, México está en favor de la moratoria y de los embargos en ese renglón, expuso.
El jefe de la diplomacia mexicana mencionó que el Grupo de Río comparte la idea de evitar que los presupuestos sean destinados a la adquisición de armamento, cuando pueden ser empleados para ``fines de bienestar social''. No obstante, corresponde a cada nación decidir sobre la modernización de sus equipos militares.
Durante una reunión con periodistas mexicanos y corresponsales extranjeros, dio a conocer la agenda de la reunión presidencial del mecanismo de concertación política de América Latina y el Caribe, el Grupo de Río, que tendrá lugar los días 23 y 24 de agosto en Asunción, Paraguay.
Los temas a tratar por los mandatarios de México, Argentina, Bolivia, Brasil, Colombia, Chile, Ecuador, Honduras, Guyana, Panamá, Paraguay, Perú, Uruguay y Venezuela estarán relacionados con la democracia y educación, medio ambiente y desarrollo y políticas contra la pobreza, y desarme y control del tráfico ilícito de armamento. Por primera vez en la historia del foro multilateral tocarán el asunto de la reforma económica y política de la Organización de Naciones Unidas.
En esta ocasión, los presidentes también dialogarán sobre las acciones unilaterales adoptadas por terceros países, como la ley estadunidense Helms-Burton, la certificación antidrogas de la Casa Blanca y el levantamiento del embargo a la venta de armas adoptado por Washington.
La delegación mexicana ha presentado dos iniciativas a los países miembros del Grupo de Río para el combate al tráfico ilícito de armas y el autocontrol de las armas convencionales. La última iniciativa está orientada a lograr un equilibrio en la adquisición de armamento y que los recursos sean destinados a proyectos de bienestar social. Los proyectos serán discutidos por los mandatarios de la región.
Los periodistas preguntaron a Gurría cuál sería la posición mexicana en la próxima reunión del mecanismo de concertación política frente al levantamiento del embargo de venta de armas a los países de América Latina, adoptado recientemente por el gobierno estadunidense.
``En la última reunión de cancilleres del Grupo de Río, en Asunción, se expresó la intención común de evitar que en la región hubiese una carrera de armamentos, que se desvíen recursos que son muy necesarios para otros fines prioritarios del bienestar social de nuestros países, en lugar de desviarlos para el uso de armas'', inició.
Gurría mencionó que la decisión de adquirir armamentos y modernizar sus equipos militares corresponde a cada nación, de acuerdo a sus necesidades para asegurar la seguridad interior y preservar la integridad territorial. ``Lo que sí es importante, es evitar que a raíz de que haya decisiones unilaterales que parezcan alterar estos equilibrios, pudiera darse una escalada de adquisición de armamento en la región, que diera lugar a una mayor inestabilidad. Es un dato conocido y generalmente aceptado que la existencia de estos o ciertos tipo de armamentos no genera equilibrios, sino desequilibrios'', expuso.
De tal manera que el gobierno de México apoya las iniciativas de moratoria o los embargos de venta de armas en la región de América Latina y el Caribe, agregó.
Con respecto a la creación de un Centro Multilateral Antidrogas que tendrían su sede en Panamá, Gurría opinó que la propuesta ``suena loable y aceptable'' para el combate a la lucha regional contra el tráfico ilícito de estupefacientes, y continúa en una fase de consultas bilaterales y multilaterales.
Sin embargo, la iniciativa debe estar orientada al intercambio de información e inteligencia y no de operativos. ``No estamos hablando aquí de la formación de fuerzas de tarea conjuntas ni de grupos operativos ni de policías conjuntas ni de ejércitos ni de nada vayan a actuar conjuntamente'', manifestó.
Durante su visita a Asunción, el presidente Ernesto Zedillo sostendrá reuniones de trabajo por separado con los mandatarios de Venezuela, Rafael Caldera; Colombia, Ernesto Samper; Brasil, Henrique Cardoso; Ecuador, Fabián Alarcón, y Bolivia, Hugo Bánzer.