La ``ola'' de hechos violentos no creará desestabilización, pero la sociedad no puede ser rehén de criminales: dirigentes privados
Patricia Muñoz Ríos Ť La ``ola'' de asesinatos y actos violentos cometidos en el país no causará desestabilización, pues la recuperación macroeconómica es sólida, pero la sociedad no puede ser ``rehén'' de la delincuencia, advirtió ayer el sector empresarial, al manifestar su abierto rechazo contra el clima de total inseguridad en que ha caído México.
Las dirigencias de la Confederación Patronal (Coparmex), de la Confederación de Cámaras Nacionales de Comercio (Concanaco) y de la Cámara Nacional de Comercio de la Ciudad de México (Canaco), Coparmex, la Concanaco y la Canaco de esta ciudad, coincidieron en que la inseguridad es ya el problema número uno a resolver en el país.
Señalaron que no aceptarán la violencia y la agresión como forma de vida nacional y denunciaron que lo más grave, es que algunas autoridades brindan protección a las bandas de delincuentes, pues sin ella serían imposibles sus operativos tan graves.
La Coparmex apuntó que durante los últimos años la sociedad mexicana atestiguó el crecimiento de los niveles de inseguridad en esta ciudad e incluso el gobierno ha pagado un ``costo político'' por esta situación.
En materia de seguridad pública la nación está reaccionando cuando la situación es insostenible y la estabilidad social se encuentra en peligro, considera la representación patronal.
En tanto, la Concanaco y la Canaco se pronunciaron por que se lleven a cabo investigaciones realmente de fondo, pues ``como sociedad ya nos estamos acostumbrando a que se den este tipo de hechos violentos y nunca se esclarezcan''.
Lo fundamental es que se fortalezca el estado de derecho, pues sólo así se evitará la impunidad, la corrupción y que los ilícitos queden sin castigo, que es la única forma de poner un freno al clima que impera en el país, apuntó la Confederación de Comerciantes.
Al igual que la Coparmex, este organismo considera que la situación delictiva es tan grave que debe tomarse como un asunto de máxima prioridad, ya que ha rebasado a la sociedad y las estructuras gubernamentales.
A su vez, la dirigencia de la Canaco expuso que hay una evidente protección de bandas de delincuentes por parte de algunas autoridades y ello se comprueba por el hecho de que la mayor parte de las veces no se captura a los criminales, los que siempre pueden huir luego de haber cometido el ilícito.
Las organizaciones criminales cuentan con toda una estructura delictiva en la que participa mucha gente y se paga además información y protección de fuera, pues no es posible, por ejemplo, que en el caso de las bandas de asaltantes, estas cuenten hasta con lugares de almacenaje de productos robados, así como de los mismos sitios de distribución y venta.
Esta complicidad entre delincuentes y autoridades tienen que terminar pues el servicio publico no es pretexto para el lucro personal y menos en el servicio a la seguridad de la sociedad, asegura esta Cámara.
A este respecto, la Confederación Patronal señaló que desafortunadamente uno de los problemas más graves que tiene el país es la falta de colaboración de la ciudadanía con la autoridad en materia de seguridad, lo cual es provocado por ``la falta total de credibilidad en la misma''.
La policía ha perdido su imagen de servidor para convertirse en muchos casos en una amenaza, además de que el sistema promociona que el delincuente sea un privilegiado, está protegido por Derechos Humanos y hasta tiene acceso a información de quién lo delató, por lo que cual tiene acceso a la venganza. Esto debe cambiar, a la autoridad le corresponde hacer un esfuerzo considerable para mejorar el sistema, aseguró el organismo.