Trabajadores peruanos de centros educativos culpan al gobierno del asesinato de su dirigente
Afp, Dpa, Ansa, Reuter y Ap, Lima, 5 de agosto Ť El secretario general del Sindicato Unitario de Trabajadores Administrativos de Centros Educativos (SUTACE), Otiliano Granados, fue asesinado el domingo, denunció hoy el gremio, que responsabilizó del ataque al Servicio de Inteligencia Nacional, mientras que las au- toridades atribuyeron el crimen a delincuentes comunes.
La denuncia se produjo en momentos en que circularon insistentes versiones sobre la detención Cecilia Valenzuela, autora del reportaje de la revista Caretas que hace varias semana puso en duda la legalidad de la nacionalidad peruana del presidente Alberto Fujimori, especie que fue desmentida horas después por la propia periodista.
De su lado, Javier Pérez de Cuéllar, ex secretario general de la Organización de Naciones Unidas, presentó una denuncia ante la justicia por supuesto espionaje telefónico en su contra, hecho que fue denunciado el domingo pasado por la televisora Frecuencia Latina.
Pérez de Cuéllar sostuvo que la existencia de esa red de espionaje pone en tela de de juicio la relección de Fujimori en 1995, al tiempo que anunció que denunciará el caso ante la Comisión Interamericana de Derechos Humanos.
``Lo que está en juego no es una persona, no soy yo, sino que es el prestigio de nuestro país dentro y fuera del territorio, es el prestigio del Poder Judicial'', dijo el también ex candidato presidencial.
Pérez de Cuéllar calificó como ``delincuentes'' a los autores de esas escuchas ilegales, reveladas y atribuida a los servicios de inteligencia por la televisora Frecuencia Latina.
El ex diplomático presentó al fiscal de la nación, Miguel Aljovín, los casetes y transcripciones de las grabaciones de unas mil llamadas telefónicas recibidas o efectuadas desde el teléfono de su casa, que le fueron proporcionadas por Frecuencia Latina.
Por lo pronto, el ministro del Interior, José Villanueva, firmó la autorización para que un procurador especial investigue las denuncias formuladas el mes pasado, precisamente por Frecuencia Latina, de que 197 diputados, empresarios, artistas y periodistas fueron espiados telefónicamente por el Servicio de Inteligencia.
Voceros del SUTACE y del Sindicato Unitario de Trabajadores de la Educación (SUTEP) denunciaron que Otiliano Granados fue asesinado la madrugada del domingo por hombres de ``porte militar'', que tenían la misión específica de ejecutarlo.
Agregaron que Granados, de 33 años, fue asesinado en un empobrecido sector del distrito limeño San Juan Lurigancho, por desconocidos que, tras dispararle a quemarropa, le robaron una cámara de video.
Según testigos, los agresores, que se movilizaban en un automóvil, llamaron por su nombre a Granados, lo que desvirtúa la versión policial de que el móvil del asesinato fue el robo.
``Responsabilizamos al Servicio de Inteligencia Nacional'', dijo el secretario general del SUTEP, Olmedo Auris, quien agregó que ``Granados tenía importantes denuncias que hacer. En el Congreso Nacional de Trabajadores de la Educación (que comenzó este martes) íbamos a delinear la política a seguir por parte del magisterio frente al gobierno.
La viuda de Granados, Violeta Melgarejo, indicó que su marido recibió ``amenazas de muerte a través de llamadas anónimas''.
En 1992 fue asesinado el secretario general de la Confederación General de Trabajadores de Perú, Pedro Huillca, en un hecho atribuido por la policía a Sendero Luminoso, pero la familia del dirigente sindical responsabilizó del homicidio al grupo paramilitar Colina, responsable del asesinato de un profesor y nueve estudiantes universitarios, en lo que fue conocido como la matanza de La Cantuta.
En otros asuntos, un centenar de pueblos de la sierra del Callejón de Huaylas, en el departamento de Ancash, quedaron incomunicados al derrumbarse parte de una montaña en la carretera que une a las ciudades de Caras, Huayanca y Chimbote.