Bedoya: serviré a Colombia como civil

Afp, Reuter, Ap, Dpa, Efe y Ansa, Santafé de Bogotá, 25 de julio Ť El destituido comandante de las fuerzas armadas de Colombia, general Harold Bedoya, afirmó este viernes que continuará sirviendo al país, y no descartó una eventual postulación a la presidencia de esta nación, tras aceptar su remoción decidida por decreto.

El general Bedoya, un controvertido oficial de 56 años, fue destituido de manera sorpresiva el pasado jueves por el presidente Ernesto Samper, quien adujo ``razones de Estado''.

Pero además de la sorpresa que causó la remoción, la tensión surgió cuando el general expidió un comunicado en el que expresó que no renunciaría voluntariamente, y aseguró desconocer las razones de Estado invocadas por el presidente para separarlo de la institución militar.

Esta actitud obligó al mandatario colombiano a retirar del servicio a Bedoya mediante decreto, no sólo de su cargo, sino del ejército, y fue remplazado por el general Manuel Bonnet, hasta ayer comandante de las fuerzas armadas.

El general Bedoya, considerado un alto militar de línea dura, es un acérrimo enemigo de cualquier clase de acercamiento con la guerrilla y se había convertido en un crítico constante de las acciones del gobierno del presidente Samper.

En sus primeras declaraciones tras aceptar su relevo, Bedoya dijo que respetará la orden presidencial, lo que disipó por completo los temores de un eventual intento de insubordinación.

El ejército, por su parte, expresó a su vez su lealtad y respaldo a la figura y rango del presidente Samper.

El ex alto militar, que asistió a su último acto oficial en el departamento de Chocó, dijo que desea continuar sirviendo al país, y que si se lo pide la población, podría aspirar a la presidencia.

``Dediqué lo mejor de mi vida al ejército y ahora tengo dolor de patria por tener que dejar mis responsabilidades. En adelante ayudaré a Colombia como civil'', declaró.

El nuevo comandante de las fuerzas armadas colombianas, general Manuel Bonnet, sostuvo al jurar el cargo que la institución castrense respetará la instituciona- lidad, a las autoridades legítimamente constituidas y no se convertirá en un problema más para la nación.

Bonnet añadió que la fuerza pública a su cargo se comprometerá a buscar por todos los medios la tranquilidad y la paz para el país, así como el libre funcionamiento de las instituciones.

Pero el gobierno negó que el retiro de Bedoya haya sido en respuesta a una exigencia de las guerrillas que operan en el país.

Fuentes del Ejecutivo insistieron en que la salida del ex militar obedece a sus constantes discrepancias con la política de reconciliación nacional y calificaron de absurdas las versiones de que su salida fue por peticiones de los rebeldes.

Sin embargo, el relevo de Bedoya polariza a país entre quienes piensan que Samper está cediendo ante la guerrilla, y los que creen que se abre una puerta hacia la paz.

Así, el candidato presidencial independiente, Antanas Mockus, expresó que la decisión de Samper implica una seña de fortaleza de un gobierno civil a los evidentes desacuerdos entre el Ejecutivo y el ex comandante del ejército.

Pero el diputado conservador Pablo Victoria dijo que con la salida de Bedoya ``comienza a perfeccionarse la magna obra del mandatario Samper, que es entregarle el país a los guerrilleros para lograr la paz''.

Precisamente, el gobierno presentó hoy al Congreso el proyecto de ley que crea el Consejo Nacional de la Paz, un intento por poner fin al conflicto armado que sacude al país desde hace más de tres décadas.

La iniciativa pretende construir una política de paz permanente que involucre de manera activa a la ciudadanía en los problemas sociales del país.

Tendrá representantes de diversos sectores de la sociedad, como los grupos económicos, la Iglesia católica, los indígenas, los sindicalistas, entre otros.

El consejo y será dirigido por el mandatario y estará integrado por los ministros del Interior, Defensa y Justicia, así como por un representante de la confederación de gobernadores y de municipios.

Las ramas judicial y legislativa también estarán representadas en el organismo, que deberá asesorar al gobierno en la búsqueda de la paz, el respeto y promoción de los derechos humanos y su vigencia será hasta que se llegue a un acuerdo final de paz con las guerrillas.

El Consejo Nacional de la Paz, que tendrá carácter permamente sin restricciones de los cuatrienios presidenciales, comenzará su trabajo tan pronto reciba el visto bueno del Poder Legislativo.

Mientras, comandos de la guerrilla atacaron esta madrugada --en forma casi simultánea-- tres poblaciones del departamento de Cauca, con saldo de un muerto y tres heridos, además del robo a un banco y ataques a los cuarteles de la policía.

También una bomba de gran poder estalló este viernes en la sede del izquierdista partido Unión Patriótica, en Santafé de Bogotá, en un hecho atribuido por las autoridades a grupos paramilitares.