No hay listas de etarras que vivan en México, reitera Jorge Madrazo

Rosa Elvira Vargas y Georgina Saldierna Ť El procurador general de la República, Jorge Madrazo, aseguró ayer no conocer ninguna lista de presuntos etarras que se encuentren en territorio mexicano.

Ante la controversia generada por el señalamiento de que en este país residirían unos 200 integrantes de la organización separatista vasca ETA, Madrazo Cuéllar explicó que cuando hay solicitudes de detención provisional presentadas por el gobierno de España o cualquier otro, es obligación de la Policía Judicial Federal, bajo el mando del Ministerio Público, averiguar el paradero de esas personas, detenerlas y presentarlas ante un juez, para que mediante un proceso legal se determine si procede o no su extradición.

Indicó entonces que el único caso que conoce desde que dirige la PGR es el de 0scar Cadenas Lorente, cuyo proceso de extradición corresponde a los jueces determinar si procede o no, de acuerdo también con lo que declare la Secretaría de Relaciones Exteriores después de que se agoten los medios judiciales del inculpado.

A su vez, el canciller José Angel Gurría dijo que las diferencias en los cálculos sobre el número de etarras en México puede deberse a que en algunos casos sólo se trata de la solicitud de información sobre el paradero de algunas personas, y en otros sí se tiene la certeza sobre su ubicación. Pero por encima de tales circunstancias, añadió, lo que realmente realiza México es una cooperación muy estrecha en el combate al terrorismo en el mundo entero y contra la impunidad y que ninguna nación sea refugio de personas que hayan cometido ilícitos en otros.

Tanto el titular de la SRE como el procurador general fueron entrevistados en Palacio Nacional, al término de la ceremonia luctuosa por el 125 aniversario de la muerte de Benito Juárez.

Por otra parte, el secretario de relaciones internacionales del PRD, Ricardo Pascoe, condenó la muerte del concejal Miguel Angel Garrido, y explicó que si su partido no hubiera fijado una posición clara en contra del terrorismo ello equivaldría a permitir la incubación de tendencias contrarias a los objetivos y métodos políticos y pacíficos para el alcance de la democracia.

El perredista instó a las fuerzas progresistas y de izquierda a profundizar y perfeccionar las formas de acción política contra el neoliberalismo, siempre por la vía pacífica y con propuestas alternativas en las manos, y a que se manifiesten puntual o intransigentemente contra acciones como las que llevó a la muerte al concejal, sin olvidarse de condenar a los estados que con su opresión a los pueblos generan violencia.

Consideró insuficiente que la organización política Herri Batasuna sólo lamente la muerte del político español. Las razones que se esgrimen para explicar o justificar el asesinato del político no convencen a nadie, expresó.