La Jornada 18 de julio de 1997

Reconoce el nuevo nuncio la labor del obispo hacia una solución en Chiapas

Rosa Elvira Vargas Ť El nuevo representante del Vaticano en México, Justo Mullor García, dijo haber advertido una actitud abierta en Samuel Ruiz García, para encontrar soluciones --``no sus soluciones''-- al conflicto de Chiapas. Admitió también que el obispo de San Cristóbal ``vive una situación muy compleja que no se puede definir con una sola palabra'' y que se trata de un pastor que se ha interesado en los problemas sociales de su comunidad.

Apuntó además que espera conocer, tratar y ayudar al religioso, ``porque me parece que es la manera más honesta de afrontar los problemas''.

No hay que ver las cosas en blanco y negro, sino en colores, mencionó. En la actual situación chiapaneca hay cosas buenas, malas y mediocres, y muchísimos intereses de por medio, ``quizá más de los que podamos imaginar desde fuera''.

Mullor acudió ayer a Palacio Nacional a entregar sus cartas credenciales al presidente Ernesto Zedillo. Hicieron lo propio los nuevos embajadores de Chile, Singapur y Guinea Ecuatorial. Luego del acto, el nuncio apostólico --quien acudió ataviado con sus vestimentas de arzobispo-- pidió a los mexicanos ``ponerse de acuerdo en qué es hacer política''.

Esto, subrayó Mullor, porque a veces hacer política es hablar de cosas sociales y un pastor tiene que interesarse si la gente sufre. Hacer política es expresarse sobre partidos, ``pero yo les aseguro que haré lo posible para que dentro de la Iglesia no hablemos de partidos''.

Ofreció que buscará, en sus contactos con dirigentes políticos, que éstos respeten la libertad religiosa ``en su totalidad'', pues le gustaría que los mexicanos pudieran escoger libremente entre los diferentes partidos, sobre la base de que puedan aportar bienes sociales y prosperidad económica, sin necesidad de que se califiquen como católicos o no. ``Basta que sean democráticos'', señaló.

También aludió a los ricos y los exhortó a pagar su hipoteca social, tanto si su fortuna proviene de vías honradas, ``e incluso más'' si son ricos por fuentes deshonestas. Para éstos, subrayó, será mayor la obligación social y moral.

``Yo admiro a los capitanes de industria como hombre, no como sacerdote. Ellos son capaces de crear 300 mil puestos de trabajo, son hombres muy importantes para la sociedad; no tiene que hacerlo todo el Estado, lo tienen que hacer los individuos. Entonces, lo que hay que hacer es que esa riqueza que llega a unas manos, después como riachuelos fecundos llegue a la sociedad entera y pueda crear puestos de trabajo, traducirse en escuelas, en obras sociales''.

De entrada, Mullor García ratificó su divisa de ser en México 90 por ciento pastor y 10 por ciento diplomático, y se refirió también al caso del extinto cardenal Juan Jesús Posadas Ocampo. Sobre el particular afirmó que ese caso corresponde resolverlo a la justicia, pues ``no es mi misión sustituir a los legítimos tribunales mexicanos''. Aclaró que poco a poco conocerá la información de las indagaciones sobre ese asesinato, pues por ahora no sabe las incidencias ni el desenvolvimiento de cómo se ha presentado el asunto a la opinión pública.

El nuevo nuncio consideró que las relaciones entre la Iglesia y el Estado tienen que ser relaciones ``no forzosamente enemigas sino necesariamente amigas, pero también en una separación clara... laicismo es la combatividad por parte de poderes del Estado contra la Iglesia. No estoy de acuerdo. La laicidad es la legítima separación entre ambos poderes'', aunque ésta, aclaró, no obsta para que haya buenas amistades. Dijo que, en su opinión, existen dos clases de neoliberalismo: puede ser bueno y creador de riqueza, aquel que ponga a la persona humana como centro del sistema. Y malo, el que fomenta individualismos de los ricos o de los consumistas.

Y es que Ecatepec, donde apenas estuvo el miércoles, impresionó sobremanera al nuncio. Consideró que se trata de un lugar donde el desorden y la pobreza son ``el precio social de un desarrollo''. De eso, dijo, habló también con el presidente en la ceremonia protocolaria y adelantó: ``Algún día haremos una visita juntos a Ecatepec''.