Disminuir el IVA a 10%, en la agenda de perredistas y panistas
Oscar Camacho Guzmán Ť El virtual coordinador de la próxima diputación perredista, Porfirio Muñoz Ledo, comenzó a despachar desde ayer en San Lázaro, y junto con Pablo Gómez anunció que en la agenda de su fracción para la siguiente legislatura está la disminución del IVA del 15 al 10 por ciento, así como la revisión en un Congreso Constituyente de las reformas del salinismo en los artículos 3o, 27 y 130 constitucionales.
Por su parte, la fracción del PAN trabaja también a pasos acelerados en la elaboración de un presupuesto alternativo en el que se mantiene la propuesta de disminuir el IVA y redefinir la política fiscal, a fin de que se utilice esta herramienta como un promotor de las inversiones mediante la eliminación del impuesto al activo de las empresas.
El mencionado presupuesto es elaborado por los diputados Salvador Beltrán y Jorge Ocejo, con la asesoría de empresarios y comerciantes afiliados a la Canaco.
Porfirio Muñoz Ledo y Pablo Gómez acudieron ayer a San Lázaro para iniciar la coordinación de cambio en la fracción, y desde su llegada el ex presidente del PRD causó revuelo y como siempre apoyos y recelos. ``Aquí todavía despachan los diputados y hasta el último día de agosto, los legisladores seguimos siendo nosotros'', comentaban con sarcasmo Isidro Aguilera y Salvador Martínez della Rocca.
Al delinear lo que será la agenda legislativa de trabajo del PRD para la 57 Legislatura, Muñoz Ledo dijo que durante la negociación del presupuesto para 1998, su fracción promoverá la desaparición de la partida secreta del presidente de la República, la cual en el actual ejercicio alcanzó los 37 mil millones de pesos.
De igual forma, indicó que se pedirá la revisión de los subsidios injustificados a rubros como carreteras y la banca, así como terminar con el desvío de recursos y redundancia en gastos. Añadió que se promoverá la descentralización del gasto hacia estados y municipios, un sustancial aumento al gasto social y la elevación del salario. Señaló finalmente que las reformas a los artículos 3o, 27 y 130 no podrán ser revisadas más que en un Congreso Constituyente, por tratarse de preceptos constitucionales, pero apuntó que existen otras leyes secundarias que sí pueden entrar en un paquete de revisión.