Inician fracciones cabildeos informales sobre reglamento interior, informe presidencial y presupuesto
Oscar Camacho Guzmán Ť A mes y medio de que entre en funciones la primera legislatura en la que el PRI no tendrá ya mayoría absoluta, fracciones y partidos han iniciado cabildeos informales en torno a tres asuntos de corto plazo: cambios al reglamento de la Cámara de Diputados, formato para el Informe presidencial y propuestas para el Presupuesto de Ingresos y Egresos de 1998.
Al interior del PRI se ha aceptado que desaparezca la Gran Comisión y restructurar comisiones legislativas, al tiempo en que comienzan a promoverse reformas para eliminar legisladores plurinominales, así como otras que permitan la reelección de diputados y senadores. Asimismo, se busca mantener el control de cuatro comisiones fundamentales: Régimen Interno y Concertación; Gobernación y Puntos Constitucionales; Hacienda, y Programación y Presupuesto. Además, se acepta que la Comisión de Vigilancia sea presidida por un diputado del Partido de la Revolución Democrática.
Entre las filas perredistas, mientras tanto, empieza a promoverse la posibilidad de un acuerdo para modificar el formato del Informe presidencial, a fin de que se realice como un ``informe de diálogo''. Dos son las variantes: una sugiere que el Presidente esté presente en el salón de sesiones a fin de escuchar las posiciones de las fracciones; posteriormente daría lectura al texto para terminar con la respuesta, que en esta ocasión correría a cargo de un diputado de oposición, entre quienes comienza a manejarse el nombre de Porfirio Muñoz Ledo.
La segunda considera que el primer mandatario entregue el Informe, ya sea personalmente o que lo envíe, y se presente en una sesión posterior a dialogar con los legisladores sobre el contenido del mismo. En ambos casos, no habría interpelaciones.
Por lo que toca al Presupuesto de Ingresos y Egresos de 1998, los cabildeos han comenzado a darse bajo la posibilidad de que el Ejecutivo adelante la fecha en que deberá entregarlo al Congreso de la Unión, a fin de que las fracciones puedan conocerlo con suficiente antelación para poder consensar los eventuales cambios al mismo.
Por otra parte, en San Lázaro, el legislador priísta Augusto Gómez Villanueva consideró que tras los comicios ha llegado el tiempo de analizar las modificaciones de ley que sean necesarias para desparecer las posiciones que se otorgan a la oposición por la vía plurinominal, así como abrir las vías de reelección a legisladores.
Por su lado, el diputado Jorge Moreno Collado explicó que de acuerdo con la nueva conformación de la cámara, al PRI le tocará presidir solamente 24 de las 48 comisiones actuales, en tanto que Juan José Osorio e Ignacio González Rebolledo reconocieron que no habrá Gran Comisión en la siguiente legislatura y que todas las decisiones deberán tomarse por consenso.
A su vez, el coordinador designado de la diputación electa del PRD, Porfirio Muñoz Ledo, dijo que la cámaras deberán restructurarse ``de arriba a abajo'', desde el reglamento interno hasta la integración de las comisiones, pasando por la presentación del Informe presidencial, la toma de decisiones y la misma estructura física del inmueble.
Señaló que las decisiones deberán ser por consenso y anunció que tendrá que cambiar la elaboración de iniciativas en la que la mayor parte sean de los legisladores y no del Ejecutivo, así como reformular el espacio de trabajo para las comisiones.