Beneplácito general por la reunión del Presidente con el perredista

Bertha Teresa Ramírez, Víctor Ballinas, Miriam Posada, Georgina Saldierna, Elizabeth Velasco y Karina Avilés Ť Como signo de los nuevos tiempos que vive el país y un hecho que genera confianza en el proceso de transición a la democracia, calificaron funcionarios, diputados, juristas y líderes de organizaciones no gubernamentales a la reunión que sostuvieron el presidente Ernesto Zedillo y el jefe de gobierno electo, Cuauhtémoc Cárdenas, quienes acordaron que el perredista designará al procurador y al jefe de la policía capitalina.

El secretario de Seguridad Pública, Enrique Salgado Cordero, señaló que el ofrecimiento del Jefe del Ejecutivo a Cuauhtémoc Cárdenas, para que él sea quien designe al jefe de la Policía Preventiva capitalina, ``es una determinación del Presidente que se respeta y no hay nada más que decir''.

Señaló que hasta el momento no se ha dado ningún tipo de acercamiento con la llamada Comisión de Enlace, integrada por representantes del PRD y del DDF y que encabezarán Cárdenas y el actual regente.

Oscar Espinosa Villarreal dijo por su parte que la decisión de Zedillo de ceder al jefe de gobierno electo la facultad de designar al secretario de Seguridad Pública ``es una práctica muy conveniente, es algo que francamente le apoya mucho en su capacidad de maniobra. Es muy importante que el Presidente le haya hecho este ofrecimiento; esto le permitirá a Cárdenas tener bajo su control todos aquellos elementos para cumplir una labor tan delicada como es, precisamente, la seguridad pública''.

En entrevista, dijo sentirse estimulado luego de ``leer y escuchar las declaraciones de Cárdenas'' en el sentido de que continuarán las grandes obras y proyectos de la ciudad.

Luego añadió que ``no vamos a estar exentos de rumores y de malas intenciones y de elementos que pretendan metar ruido en algo que está resultando armónico. Afortunadamente hay la voluntad de hacer las cosas de ambas partes, sin hacer caso de esos rumores que no dejan de ser eso''.

El presidente de la Comisión de Seguridad Pública de la ARDF, Pedro Peñaloza, indicó que el acuerdo sobre la designación del procurador capitalino y el titular de la SSP, al que llegaron Zedillo y Cárdenas, ``es un mensaje para aquietar a los sectores duros del PRI y del PRD, que ven la inseguridad como un elemento para minar la gestión del ingeniero''.

Puntualizó que Cuauhtémoc Cárdenas tendrá facultad para proponer a los titulares de ambas dependencias, pero la decisión final será producto de un acuerdo entre el gobierno local y el federal, porque ``antes de que alguien se maree hay que tener muy presente que el artículo 122 constitucional no se ha reformado, por lo que este acuerdo tiene como finalidad gobernar de manera coordinada''.

Peñaloza dijo que si la SSP queda al mando de un civil o un policía los jefes militares tendrán que retirarse, y el gobierno de la ciudad deberá hacer una revisión profunda del esquema policial edificado por los militares a los largo de un año.

--¿Pedro Peñaloza aspira a ser secretario de seguridad?

--Si Cuauhtémoc Cárdenas me invita a colaborar con su gobierno aceptaré con gusto.

El diputado panista Rodolfo Elizondo dijo que el encuentro forma parte de los nuevos signos vigentes en la nación. Agregó que con lo pactado el que sale ganando es el país.

Por su lado, el legislador perredista René Arce calificó como ``excelente'' el encuentro y el acuerdo alcanzado el pasado lunes; dijo que el acto demuestra que habrá colaboración, sobre todo en términos tan importantes como la seguridad.

El diputado priísta Jorge Moreno Collado señaló que lo logrado el pasado lunes es muestra de lo que es el México nuevo, en donde caben los acuerdos políticos. Advirtió, sin embargo, que al delegar a Cárdenas la decisión de nombrar al procurador y al jefe de la policía capitalina entrega también a él la responsabilidad que implica tal hecho.

Por su lado, Ignacio Burgoa Orihuela, maestro emérito de la UNAM, dijo que ``de acuerdo al artículo 122 de la Constitución, la designación (de ambas autoridades) compete al Presidente de la República. Sin embargo, la decisión del presidente Zedillo (de dejar abierta esa posibilidad a Cárdenas) se estila en todos los regímenes de países democráticos y civilizados políticamente. Los ciudadanos debemos estar satisfechos por esta decisión que beneficia a todos los capitalinos''.

El jurista Emilio Krieger dijo por su lado que el acuerdo es el primer paso para un entendimiento al servicio de la población. ``Con él se crea un ambiente de esperanza, ya que Cárdenas podrá tener la independencia necesaria para corregir errores y despojos cometidos durante 15 años de neoliberalismo''.

En tanto, el dirigente colegiado del Partido del Trabajo (PT), Oscar González Yáñez, sub-rayó que Cárdenas adquiere una gran responsabilidad al nombrar al procurador de Justicia y al secretario de Seguridad Pública, pues si ``da una solución real al problema de la inseguridad --lo cual no está en sus manos-- tendría gran éxito, pero de no ser así toda la responsabilidad política recaerá sobre él''.

El presidente Zedillo otorgó a Cárdenas ``plena libertad'' para llevar a cabo su gestión al darle la responsabilidad de designar al jefe de la policía y de la PGJDF, consideró por su parte el Partido Auténtico de la Revolución Mexicana (PARM).

Agregó que la decisión del Ejecutivo no es vista por el PARM como ``una trampa'', el organismo político aseguró que los votos que recibió el PRD no fueron en contra del PRI, sino ``a favor del líder moral Cuauhtémoc Cárdenas'', calificado por el PARM como ``un hombre probo, honesto, vertical y transparente''.

El vocero de Alianza Cívica, Emilio Alvarez Icaza, dijo que el acuerdo refuerza los mecanismos de consenso y negociación, impulsa una nueva cultura política y fomenta la esperanza de que será pacífico el proceso de transición a la democracia en el país.