La deuda externa de AL, impagable, reitera Fidel Castro

Afp, Reuter, Pl, Dpa y Efe, Caracas, 11 de julio Ť El presidente cubano, Fidel Castro, reiteró este viernes que la deuda externa latinoamericana sigue siendo impagable debido a su ``gigantesco'' monto, cuyo pago ha significado un proceso de desgarramiento para la región.

En una ponencia enviada al seminario Deuda externa y el fin del milenio, que presentó en Caracas el ministro cubano de Economía, José Luis Rodríguez, Castro indicó que la deuda externa de América Latina llegó a fines de 1996 a 607 mil 230 millones de dólares, pese a que pagó por concepto de intereses entre 1982 y 1996 un total de 739 mil 900 millones de dólares.

``Llegamos a la conclusión de la impagabilidad de la deuda y la necesidad de una solución que parte del reconocimiento de esa realidad objetiva'', subrayó Castro en el foro organizado por el Parlamento Latinoamericano y el Congreso venezolano.

Señaló que ya expresó en 1991 su preocupación por la deuda a la Comisión Económica para América Latina, a Naciones Unidas en 1979 y al Movimiento de los No Alineados en 1983.

Aseveró que los 15 años de crisis de la deuda son también años de mayor crecimiento de la pobreza y la desigualdad, las graves carencias en la educación, la salud, el desempleo, la seguridad social, y también en la estabilidad política.

Castro aseveró que en términos estrictamente jurídicos, las obligaciones no pueden cumplirse cuando lo impiden causas no imputables al deudor o cuando ha tenido efecto un cambio fundamental de las circunstancias que modifica el contenido esencial de la relación jurídica.

Recordó que un problema ha sido la falta de una postura concreta de los gobiernos latinoamericanos, que se limitaron a reaccionar ante las iniciativas y planes de los acreedores, por lo general aceptándolos.

Mientras, el grupo anticastrista Movimiento por la Democracia efectuará el próximo domingo una protesta a bordo de varias embarcaciones frente a aguas cubanas, en homenaje a las víctimas del hundimiento del remolcador 13 de Marzo, que intentaba llegar a Estados Unidos, el 13 de julio de 1994.

El dirigente Ramón Saúl Sánchez anunció que él será el único participante en el acto que se adentrará en aguas cubanas, a las que llegará a bordo de una ``pequeña e inofensiva balsa'', e intentará llegar al punto donde se hundió el remolcador cargado de cubanos, a ocho millas de las costas de Cuba.

Con este acto la organización anticastrista, que envió un mensaje por fax al cuerpo diplomático, y a la prensa extranjera acreditados en La Habana, pretende que se le reconozca el derecho a entrar en la isla pues, añadió, tradicionalmente el gobierno cubano ha negado la entrada al país a cualquiera que sea considerado contrario a la ideología oficial.

La guardia costera de Cuba aún no ha definido las medidas que adoptará con esta convocatoria, que partirá de Cayo Hueso, Florida, aunque el portavoz del Departamento de Estado, Nicholas Burns, señaló que las personas que entren al territorio, espacio aéreo y aguas de Cuba sin autorización de La Habana, estarán en peligro, y que será muy limitada la capacidad del gobierno de Estados Unidos para asistirlos.

Burns pidió a los cubanoestadundienses no violar las restricciones marcadas por las leyes internacionales, y a Cuba actuar con prudencia y evitar utilizar la fuerza ante la anunciada protesta.

Por otro lado, el vocero dijo que son suficientes para defender de cualquier amenaza procedente de Cuba las fuerzas que Estados Unidos mantiene en la base naval de Guantánamo, en referencia a un informe del Pentágono, publicado por The Washington Times, que señala que La Habana estaría desplegando misiles tierra-mar para atacar navíos de guerra, cerca de las bases estadunidenses.

Agregó que Cuba está desmantelando su flota de guerra de alta mar por falta de recursos para mantenerla, y utilizará los cohetes y otros equipos para reforzar su defensa costera, donde podrían ocurrir ``desembarcos anfibios hostiles''.

En La Habana, la Asamblea Nacional del Poder Popular comenzó hoy su primera sesión del año en presencia del presidente Fidel Castro, y aprobó tres nuevas leyes que establecen normas para proteger el medio ambiente y preservar la legalidad de la Fiscalía General de la República y los Tribunales Populares.

La segunda sesión del Parlamento está prevista para diciembre próximo.