Zedillo: los radicalismos ya no tienen cabida como medio de cambio
Elena Gallegos Ť Las elecciones probaron que no hay razón válida para apartarse de la ley o para desconfiar de la democracia, dijo el presidente Ernesto Zedillo, y señaló que en la nueva vida política del país ya no tienen cabida los radicalismos, los fundamentalismos o la violencia como medios de cambio. La tarea que sigue, convino, es la de eliminar la impunidad y combatir la corrupción, como lo reclama la sociedad, con decisión, rigor y, ``ahí sí, sin ninguna tolerancia''.
En el salón Adolfo López Mateos de Los Pinos, donde encabezó el acto con el que se celebró el Día del Abogado, Zedillo sostuvo que todos los mexicanos exigen también que las autoridades sean más eficaces en el combate a la delincuencia y la inseguridad pública.
Por eso, aseguró que en ese nuevo clima de concordia que impera en el país se debe ``trabajar conjuntamente en la consolidación del estado de derecho. De la seguridad jurídica --dijo-- se derivan todas las demás seguridades''.
En otra parte de su discurso, el Presidente calificó también de ``muy alentadoras'' las respuestas de los mercados financieros a las campañas y a las elecciones mismas. ``Es una muestra muy clara de que la confianza se fortalece con el cumplimiento de la nueva legalidad democrática''.
Resumió así la participación ciudadana del domingo en las urnas: ``Con la fuerza de sus votos, el pueblo dio el mandato de seguir avanzando en el diálogo y en la construcción de consensos que requiere la nación para seguir desarrollándose''.
Frente a los integrantes de distintas agrupaciones de abogados, el jefe del Ejecutivo señaló también que es preciso encontrar las fórmulas más adecuadas para dar a todos los hombres y mujeres, así como a todas las empresas y organizaciones sociales, un acceso equitativo a los órganos de procuración e impartición de justicia.
Fue cuando dijo: ``Tenemos que avanzar y tenemos que hacerlo muy rápidamente en la eliminación de la impunidad. Todos los grupos sociales, con mucha razón, reclaman combatir con más decisión la corrupción, detectándola donde quiera que se dé y sancionándola con toda fuerza, con todo rigor y, ahí sí, sin ninguna tolerancia y conforme a la ley''.
Zedillo se alegró de que hoy todos los mexicanos, independientemente de por quién votaron o a qué partido apoyaron, pueden sentirse orgullosos y más unidos. ``Orgullosos, porque celebramos una elección de verdad ejemplar que demostró que la democracia electoral se está arraigando firmemente, y más unidos porque, por encima de la intensidad de las campañas y las preferencias electorales, ahora los ciudadanos compartimos la satisfacción del retorno a la cotidianeidad''.
Consideró que eso es parte, precisamente, de la normalidad democrática. Enseguida repitió que el 6 de julio no surgió del vacío, sino que fue la culminación de un largo camino que los mexicanos recorrieron hacia la creación de espacios legales e institucionales para fortalecer su pluralismo.
``Hoy, a partir de la aplicación estricta y justa de la nueva legalidad, tenemos y seguiremos teniendo un sistema de partidos fortalecidos que habrá de ser un firme sustento para la vida democrática del país'', afirmó el primer mandatario.
Estableció que la legalidad y la práctica democrática que se han construido en México demuestran que en la vida política ya no caben radicalismos, intolerancia o, mucho menos, la violencia como medios para transformar el país hacia la justicia y la equidad social. ``Las elecciones probaron que la ley y la democracia son el camino para resolver nuestros problemas, por graves que sean, en paz y sumando el esfuerzo de todos''.
Finalmente, Zedillo insistió en que la participación en la jornada electoral demuestra, una vez más, que el pueblo de México desea que se avance con la fuerza de la ley y la solidez de las instituciones, e insistió en que en la nueva cultura política los gobernantes deben actuar conforme al interés colectivo y siempre inflexiblemente, en el marco del derecho.
Ausentes, el estado de derecho y la ley en México: Gómez Gordillo
En el acto habló también, entre otros, el procurador fiscal Ismael Gómez Gordillo. Lo hizo en representación de la Asociación Nacional de Abogados. Sin rodeos empezó: ``Ni el estado de derecho ni el imperio absoluto de la ley han sido realidad en México''.
Y siguió: ``La ausencia de un estado de derecho, de la ley como norma real y vigente de la conducta social, en un país donde celebramos hoy el 444 aniversario del inicio de la enseñanza formal de la ciencia jurídica, nos debe sacudir profundamente a todos los abogados, sobre todo a los que pretendimos entrar en la política por la puerta del derecho, aun a riesgo de salir del derecho por la puerta de la política''.
Sin embargo, indicó que desde la cúpula misma del ejercicio del poder el cambio ha sido impulsado, no como una concesión graciosa, sino como la genuina voluntad de respetar y hacer respetar la ley como norma social suprema.
En el acto estuvieron los secretarios de Gobernación, Contraloría y Educación, así como los procuradores de Justicia.