Formal prisión a Raúl Salinas por el nuevo cargo de lavado de dinero
Juan Manuel Venegas Ť El juez octavo de distrito en materia penal dictó ayer auto de formal prisión a Raúl Salinas de Gortari, cuyos abogados fueron notificados del nuevo proceso en contra del hermano del ex presidente de México desde la noche del 7 de julio pasado, cuando se libró la orden de aprehensión con fundamento en la averiguación previa SE/031/96-09.
Por ser considerado delito grave el lavado de dinero, Salinas de Gortari, no puede solicitar el beneficio de la libertad bajo fianza.
Raúl F. Cárdenas, integrante del equipo de defensa de Salinas, informó que su cliente aún no rinde su declaración sobre el nuevo cargo que le imputa la Procuraduría General de la República (PGR), y anunció que pedirá una ampliación del plazo para conocer su situación jurídica.
Consideró que la Procuraduría incurrió en ``una flagrante'' violación del derecho en los nuevos cargos contra Raúl Salinas, toda vez que el presunto enriquecimiento ilícito, por el que ya se le cuestiona y enjuicia en otro proceso penal, ``presenta los mismos cargos contenidos en esta nueva acusación''.
La PGR, según el abogado, ``viola lo dispuesto en el artículo 23 constitucional y el principio procesal que establece que una persona no puede ser juzgada por el mismo delito y en sentido amplio, pues el enriquecimiento ilícito y el lavado de dinero son delitos conexos''.
No obstante, en el caso de Raúl Salinas no se puede apelar a ese principio, toda vez que la PGR precisó que el lavado de dinero en el que presuntamente incurrió, por una cantidad superior a los 108 millones de pesos, lo hizo realizando diversas operaciones y transacciones financieras, utilizando el nombre de sus dependientes económicos y otras personas inexistentes o nombres falsos, con lo que de acuerdo con el artículo 115 bis, fracción uno, del Código Fiscal de la Federación, además de enriquecimiento ilícito queda tipificado el delito de lavado de dinero.