El PRI ``sigue siendo el partido más poderoso'' y el rumbo económico no cambiará, dice el subsecretario de Hacienda Werner
Reuter Ť No habrá cambios en la política económica mexicana a pesar de los resultados electorales del pasado domingo, cuando el gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI) perdió la mayoría absoluta en la Cámara de Diputados luego de haberla acaparado durante los últimos 68 años, aunque sí se observará un incremento en el gasto social basado en una mejor política fiscal, afirmó ayer lunes Martín Werner, subsecretario de Hacienda Crédito y Público.
Aunque admitió que su partido ``perdió cierto terreno'' en el Congreso, aseveró que aún retiene la cantidad necesaria de legisladores para construir consensos.
``El PRI sigue siendo el partido político más poderoso del país'' y eso le permitirá continuar con las políticas que crea más adecuadas, agregó Werner.
A pesar de que el pronunciamiento electoral de la ciudadanía parece indicar un castigo a la línea económica de gobierno tras la fuerte crisis vivida en 1995 --cuyas repercusiones aún persisten en numerosos sectores laborales y empresariales--, el alto funcionario sostuvo que era improbable su modificación.
Se deberán ``construir mayor número de consensos'', pero alcanzar una economía fuerte con crecimiento sostenido es un objetivo común, lo que permitirá un margen suficiente para lograr acuerdos, dijo Werner.
También agregó el funcionario que se requiere un aumento del gasto social, cuyo éxito depende del mejoramiento en la fiscalización.
Finalmente, ratificó la meta oficial de superar el 4.5 por ciento de incremento en el producto interno bruto para 1997, en el contexto de un crecimiento sostenible y una economía fuerte, a salvo de crisis financieras como la de finales de 1994.