La Jornada 24 de junio de 1997

Costó muchas vidas oponerse al proyecto de Salinas, afirma López Obrador

Alonso Urrutia Ť Al encabezar el cierre de campaña en Gustavo A. Madero, el candidato perredista a jefe de gobierno de la ciudad, Cuauhtémoc Cárdenas, aseveró que el PRD no sólo puede ganar la elección en la capital, sino también el Congreso, y ello ``posibilitaría echar abajo las reformas salinistas que entregaron la petroquímica básica a los intereses privados.''

Acompañado del dirigente nacional Andrés Manuel López Obrador, el candidato congregó a 2 mil 500 perredistas desbordados de fanatismo cardenista y de la posibilidad de triunfo. López Obrador aseveró que el PRD tiene en su haber su oposición frontal al proyecto de Carlos Salinas que costó muchas vidas.

Por la tarde, en comida con la Asociación Mundial de Mujeres Periodistas y Escritoras, Cárdenas respondió a críticas sobre la campaña y su proyecto.

--Se ha mencionado que con usted podrían trabajar, si gana la elección, Manuel Camacho, Fernando Gutiérrez Barrios o David Ibarra. ¿Cuál es su relación con Marcos?

--Con Marcos la relación que he tenido en siete u ocho encuentros es buscando primero establecer contactos y después acelerar el proceso de paz. Hasta ahí es la relación, no podría ser otra, de trato cordial. Respecto de las otras personas, no se ha pensado hasta ahora integrar el gobierno.

--¿Pero hay probabilidad, los conoce, son sus amigos?

--Los conozco. Nos vemos muy de tarde en tarde. Son amigos míos los tres, como tengo amistad con otros, pero no por ello serán necesariamente colaboradores.

--¿Pero podrían ser?

--Y podrían no ser.

El perredista respondió que el gobierno de la ciudad difícilmente podrá incidir en la política económica neoliberal. ``El gobierno de la ciudad no tiene la intención ni podría incidir, aunque quisiéramos, en modificar las tasas de interés u aspectos. Sí tendría otras prioridades sociales dentro de sus atribuciones''.

Cárdenas virtualmente descartó la posibilidad de conformar una coalición en el gobierno. ``Tendríamos que pensar primero en un acuerdo legislativo. En el caso del gobierno, supondría apoyar un determinado programa, en este caso el del PRD, para determinar qué posiciones les corresponderían'' (a otros partidos). Sin embargo, enfatizó que no veía condiciones para alcanzarlo.

A pregunta expresa sobre la alternancia en el poder como garantía democrática, señaló que la transición democrática no puede condicionarse a un resultado electoral. ``Lo importante es garantizar la rectitud de los procesos electorales. En este proceso se podrán medir los avances de una tendencia que ya se ha advertido en los comicios de Guerrero, Morelos, Hidalgo y el estado de México''.

Cárdenas desestimó la importancia de que 10 mil funcionarios del gobierno participen en la campaña del priísta Alfredo del Mazo. ``Se me hacen pocos'', dijo. Agregó que mientras lo hagan a título personal y no como funcionarios no hay ninguna violación electoral.

Posteriormente, en Azcapotzalco encabezó un mitin de cerca de mil 500 perredistas, a quienes les manifestó la necesidad de lograr mayor transparencia en las obras públicas y en las adquisiciones gubernamentales con una nueva legislación.

De allí se dirigió a la Gustavo A. Madero. Enmedio de uno de los más encendidos cierres delegacionales, aseveró que el PRD ha conformado ya una importante capacidad de movilización para revertir un eventual fraude electoral. El PRD, acotó, tiene capacidad de respuesta para defender el voto.

Destacó la importancia no sólo de ganar el gobierno de la ciudad sino también el Congreso. Con ello ``se podrían revertir las reformas constitucionales salinistas en materia de petroquímica; podríamos aprobar una nueva reforma política que garantice mayor transparencia electoral''.