Cuatro miradas a la ETA de hoy
--``Que se detengan; que hagan un balance. ¡por Dios! que están perdiendo apoyo y legitimidad'': José Félix Arzumendi, periodista.
--Los etarras, ``cada vez más chavales''. Simpatía hay, pero no se expresa: un antiguo comando retirado.
--ETA no es solo ETA; es un movimiento popular cada vez más reconocido: Kepa Landa, abogado.
Foto: Cortesía del periódico Egin
--Los atentados y propuestas de ETA, ``de gran calado'': Karmelo Landa, dirigente de HB.
Crítica con corazón desgarrado
Félix Arzumendi fue el primer director del diario independentista Egin, hace ya 25 años. Alguna vez militó en ETA. Hoy observa angustiado que pese a una apariencia de bonanza sin precedentes, el País Vasco se encuentra en un despeñadero. Apunta hacia ``la brecha que crece'' entre un sector de la sociedad que goza de estándares de vida que nunca antes tuvieron los euskaldunes y otro sector, el de ``la otra ribera'', con niveles de desempleo también sin precedentes y sin horizontes.
Tiene su espacio en Radio Euskadi, la radio oficial del gobierno vasco, en Bilbao, donde nos cita para hablar ansiosamente de lo que le preocupa: ``¡Es una barbaridad que sigan diciendo que ETA está más fuerte que nunca! Yo lo único que les pido a los muchachos es: deténganse un momento, hagan un balance. No pido más, un balance. Hoy es más necesario que nunca''.
Agrega: ``ETA no está ni fuerte ni creciendo por razones internas, pero también por razones que tienen que ver con el ámbito mundial. En los ochenta en las relaciones internacionales existía un ámbito que cobijaba estrategias militares al servicio de un proyecto político. Eso no existe más. La solidaridad internacional está carísima''.
Arzumendi mete el dedo en la llaga mexicana, la de las extradiciones inminentes, la del temor de los refugiados vascos: ``ETA nunca pensó que tendría que dejar su retaguardia en Iparralde (Euskadi francés). Después se confiaron en Managua. El Frente Sandinista respondió a la solidaridad que se les brindó a manos llenas entregando a Atxulo a la Guardia Civil. Hasta ahora México ha sido una retaguardia privilegiada. Pero están empeñados en terminar con ella''.En opinión de Arzumendi, ETA ha perdido base social. Y sobre todo a la juventud. ``Antes se podía decir que la universidad estaba con el proyecto abertzalista de ETA. Eso no existe más''. Tampoco lo valora positivamente en el terreno de las acciones militares: ``Ahora ETA mata menos y escribe más. Antes era más clara la línea de fuego, estaba más claro quién era el enemigo. Ahora hay un intento, en los dos bandos, de desviar la idea del enemigo a quien no piensa como ellos''.
Ni en el terreno político: ``ETA no logra ser contrapeso serio en un momento en donde el Estado de derecho en el país vasco es cada vez más cuestionable. Hoy, entre la gente común y corriente, no hablo de intelectualidad ni de militantes de uno u otro bando, se empieza a ver así''.
Para ubicar su análisis da un salto atrás, a los días riesgosos del ``tejerazo'', el intento de golpe de Estado de la Guardia Civil (febrero 23, 1981). Entonces, dice, ``los análisis de ETA eran acertados. En contraste, hay una legitimación gradual del franquismo y una deslegitimación de la lucha armada. Hay ciertos atentados --como los más recientes; han matado a dos ertzaintzas-- con los cuales la población patriótica vasca ya no puede comulgar. Hoy hay miedo, más miedo a ETA que a la Guardia Civil''.
Sobre el movimiento autonómico: ``A la izquierda abertzale (patriótica) le urge madurar. Herri Batasuna obtiene cada vez menos votos. ¿Qué queda después de la pérdida de masa votante? Mucho me temo que el siguiente paso sea retirarse del circuito electoral; la polarización extrema''.
``Ser etarra hoy demanda más cojones''
¿Nombre? ``¿Para qué lo quieres? ¿Para que me pillen otra vez, otra vez las torturas? No gracias?''.
El hombre es un compendio de secuelas: miopía aguda, meniscos destrozados, dentadura postiza, hernias discales. Que quede identificado como un antiguo comando de ETA retirado. Ex preso, eso sí.
``A diferencia de las dos décadas anteriores, la lucha armada en el país vasco está más agudizada, con campos de confrontación mucho más definidos. Al mismo tiempo, para la nueva generación de combatientes el reto de tomar las armas contra el Estado español requiere más valor, más cojones que antes, y también más claridad ideológica.
``Ahora se mueven en una sociedad rota, desarticulada y en buena medida indiferente. En los setenta las simpatías populares por ETA estaban a flor de piel. En los ochenta no era precisamente simpatía, sino un dejar hacer. Ahora hay una fuerte manipulación de la información y una animadversión contra ETA. Esto no es del todo así. Simpatía, como antes, ya no hay. Pero en los barrios y los caseríos sí hay una fuerte corriente de aceptación a lo planteado en Alternativa Democrática. Sólo que es una opinión que no se expresa''.
El ex militante recurre al inevitable ``en mis tiempos'' para explicar el salto generacional que ha habido. ``La media de edad de los miembros de ETA presos en mi época era de entre 37 y 38 años. Ahora el promedio de edad en los comandos son chavales de 20''.
``A los abertzales nos quieren en un guetto''
Kepa Landa es abogado defensor de la mesa directiva de Herri Batasuna, que enfrenta un juicio en el que el Estado Español demanda ocho años de prisión a toda la dirección del único partido autonomista por ``colaboración con banda armada''.
Habla de la polarización de la sociedad vasca, la misma que el PNV niega. La explica en la forma como desde los medios y el gobierno han logrado encajonar a las corrientes independentistas, la llamada izquierda abertzale (patriótica) en un ghetto, el ``otro mundo'' de Euskadi.
``El PNV quiere eliminar a ese otro mundo y fabrica la falsa concepción de demócratas vs violentos. Sólo que la mayoría del PNV en Euskal Herria no es tal. Cierto que tiene una ligera mayoría sobre los demás en la CAV (Alava, Vizcaya y Guipúzcoa) pero no existe en Navarra, donde la Unión del Pueblo Navarro ya desbancó a la izquierda españolista. Sólo HB tiene representación y base en las cuatro provincias (Madrid no reconoce como provincia vasca a Navarra).
``Pero esta izquierda no es eso, ni ETA es ya sólo ETA. Es un movimiento popular, social, cultural, estructurado en organizaciones sindicales, de juventud, de ideas.''.
En defensa de los atentados de ETA
Los legisladores de HB con frecuencia votan solos, a contracorriente de la mayoría, en el parlamento autonómico, sobre todo cuando sistemáticamente se emiten condenas a los atentados de ETA. Por el contrario, Herri Batasuna los considera, según explica Karmelo Landa, como ``acciones con objetivos muy calificados que demuestran una fuerza y una propuesta de gran calado''.
Landa es uno de los dirigentes de HB que fue encarcelado el año pasado por divulgar la propuesta de Alternativa Democrática. Cita ejemplos: el asesinato de Fernando Mújica, abogado del PSOE, muerto en San Sebastián. ``Fue inspirador de los GAL''. El de Francisco Tomás y Valiente, catedrático y miembro del Consejo de Estado. ``Fue inspirador del artículo constitucional español que prohíbe expresamente la independencia vasca, asesoró a Felipe González en la creación de los GAL y provocó la ruptura de la mesa de Argel''.
Continúa Landa el análisis de las acciones de ETA. ``Son ahora más selectivas, contrario a lo que se cree. Por ejemplo, los dos secuestros. José Antonio Ortega Lara, funcionario de prisiones (y miembro del sindicato ELA) actuaba dentro de la política de dispersión de presos. Cosme del Claux es cabeza de una familia antivasca, proespañola de la oligarquía bilbaína.