La Jornada 31 de mayo de 1997

$154 millones más a seguridad en el DF; 54%, para armas

Alberto Nájar Ť El gobierno federal y el Departamento del Distrito Federal gastarán este año 154 millones 913 mil pesos en la compra de armas de alto poder, helicópteros, equipo de cómputo y patrullas para las corporaciones policiacas de la capital. Con esos recursos también se construirá un Centro de Readaptación Social.

Cerca de 100 millones de pesos se destinarán exclusivamente a la compra de armas, mientras que para capacitación habrá 14 millones.

Al respecto, Pedro Peñaloza, presidente de la Comisión de Seguridad Pública de la Asamblea de Representantes, advirtió que es sumamente peligroso otorgar este equipo ``a nuestra policía aldeana, impreparada y que acostumbra disparar a la menor provocación''.

De acuerdo con el Convenio de Coordinación de Seguridad Pública, firmado por las secretarías de Gobernación, Hacienda y de la Contraloría con el DDF, y que se publicó ayer en el Diario Oficial de la Federación, el gobierno federal aportará 103 millones 72 mil 66 pesos más a los 51 millones 841 mil que corresponden al presupuesto de las autoridades capitalinas.

El convenio tiene como propósito coordinar la participación de los gobiernos federal y local en el Sistema Nacional de Seguridad Pública, así como determinar las aportaciones financieras para el actual ejercicio. Acuerdos similares se pactaron con el resto de las entidades y forman parte del programa de seguridad a nivel nacional.

De acuerdo con el Diario Oficial, entre las armas que se pretende adquirir se encuentran fusiles AK-47 conocidos como cuernos de chivo, M-16, R-15 y otros de calibre 7.62 milímetros. También se buscarán carabinas AR-15 y calibre .243, escopetas de bomba, subametralladoras Uzi y pistolas de alto calibre. Las armas se destinarán los elementos de la SSP, agentes judiciales y el personal de custodia penitenciaria.

El presupuesto también incluye una compra importante de equipo antimotín, como binoculares infrarrojos para visión nocturna, miras telescópicas con poder de ampliación y de visión nocturna, escopetas y pistolas lanza proyectiles, chalecos portagranadas, toletes, escudos, máscaras antigas, esposas para tobillos, mantas antibomba, generadores de neblina de gas lacrimógeno y bastones policiales, entre otros.

En materia de radiocomunicación, se adquirirán rastreadores de frecuencias telefónicas, micrófonos inalámbricos, analizadores de señales, equipo de rastreo y seguimiento, identificador de radio frecuencias e insertadores de códigos, entre otros.

El paquete incluye la compra de helicópteros, patrullas, camionetas pick up y motocicletas de alta velocidad, así como equipo de video para las unidades. En el Diario Oficial no se establece si las aeronaves estarán equipadas con artillería; tampoco especifica la cantidad de armas y vehículos que se comprarán. El importe del armamento, equipo antimotín y radiocomunicaciones será exactamente de 99 millones 151 mil 449 pesos. El gasto en armas equivale a once veces los recursos destinados a la compra de computadoras y es 300 por ciento superior al presupuesto contemplado para la construcción de un nuevo centro de readaptación social, el cual tendrá una inversión de 30 millones de pesos.

Es peligroso armar a policías incapaces: Peñaloza

Según Peñaloza, el incremento para la compra de armas, además de exagerado, constituye ``un coctel muy peligroso'' por las condiciones sociales que prevalecen en la capital: delincuencia descontrolada, crimen organizado, una profunda crisis social y corrupción policiaca.

Dijo que es correcta la decisión de modernizar a las corporaciones pero al mismo tiempo advirtió del peligro que implica dar armas de alto poder ``a policías impreparados, sin principios éticos y que disparan a la menor provocación''.

Y es que se trata de un asunto delicado, pues ``la delincuencia no se combate sólo con las balas, requiere de programas sociales para atacar la raíz del problema. Esto puede convertirse en un bumerán para la sociedad''.

Además, la cantidad de dinero que se otorgará para la capacitación es una muestra ``que no se piensa en una política sólida y a largo plazo para combatir a la delincuencia, alguien está pensando que es un asunto solamente de policías y ladrones''.

Por otra parte, la presidenta de la Comisión de Protección Civil de la ARDF, Estrella Vázquez, señaló ayer que la corrupción imperante en la SSP impide contar con cuerpos eficientes para la atención de desastres y ni siquiera los militares han logrado poner orden.

Se trata, indicó, de un asunto grave en extremo, pues ``solamente el territorio de la ciudad de México es atravesado por 18 gasoductos, siete poliductos y un sinnúmero de cables de alta tensión''. Nueve delegaciones cuentan con estaciones de bomberos y en las siete restantes ``se da una deficiente cobertura''.