Se fortalece la línea que vincula al narco con el caso Colosio: el fiscal
Andrea Becerril Ť Hay indicios que llevan a profundizar la línea de investigación que vincula al narcotráfico en el asesinato del candidato presidencial Luis Donaldo Colosio, reveló ayer el fiscal especial Luis Raúl González Pérez.
Entrevistado luego de una reunión de casi cuatro horas con los integrantes de la comisión respectiva del Senado, González Pérez sostuvo que ``nadie estará exento'' en esa investigación, cuya hipótesis es la participación del narco en el magnicidio.
¿Incluyendo en ello a los hermanos Carlos y Raúl Salinas de Gortari?, se le preguntó, y su respuesta fue que ``se investigarán todas las versiones que hay, esas que ustedes conocen por la prensa, vamos a tratar de indagar qué sustento tienen''.
Por separado, el presidente de la comisión senatorial que da seguimiento al expediente Colosio, Angel Sergio Guerrero Mier, informó que del total de irregularidades en la investigación que ellos han planteado, González Pérez reconoció que 25 por ciento son errores y omisiones graves, cometidos por los anteriores fiscales.
Sin embargo, agregó, aunque Miguel Montes y Olga Islas ya declararon ante la subprocuraduría a cargo de González Pérez, éste aclaró a los senadores que no se tienen todos los elementos para determinar si esos errores, que aún subsisten en la investigación, fueron cometidos con dolo.
El senador priísta Guerrero Mier informó igualmente que en la reunión el fiscal les dijo que hay nuevos elementos en torno a esa hipótesis, de la vinculación de intereses de narcotraficantes en el crimen de Colosio, pero que no podía revelarles detalles de la averiguación previa.
Agregó que la reunión fue informativa y el nuevo fiscal respondió a la comisión senatorial en torno a las 59 interrogantes que quedaron pendientes en la reunión del pasado 13 de marzo. De las 34 irregularidades planteadas por los legisladores, dijo, el fiscal reconoció que 25 por ciento son errores y omisiones graves, sobre todo en el inicio de las averiguaciones del 23 de marzo de 1994, y en las diligencias posteriores con Mario Aburto, Tranquilino Sánchez, los Mayoral y Othón Cortés.
La comisión planteó al fiscal, agregó Guerrero Mier, que mientras no se llegue al fondo del asunto, la investigación es insatisfactoria. ``En ese punto somos inflexibles y categóricos, pues conforme pasa el tiempo la situación se hace más compleja. Por eso solicitamos mayor información''.
Lo que preocupa a los senadores, resaltó, es que González Pérez no ha hecho una definición concreta sobre una cuestión fundamental, que es si se trata de una acción solitaria o de un complot para matar al candidato presidencial del PRI en 1994. ``Nosotros hemos aportado análisis jurídicos para insistir en que la hipótesis que prevalece es la de acción concertada''.
Por su lado, González Pérez dijo que a su juicio sí hay avance en las indagaciones, pues además de profundizar en la hipótesis del narcotráfico, se está trabajando en las demás líneas de investigación. Indicó que de marzo a la fecha han declarado 160 personas.
En ese sentido, comentó que incluso si se llegara a demostrar que Mario Aburto disparó el segundo tiro contra Luis Donaldo Colosio, eso no cancela de ninguna manera la necesidad de investigar quiénes fueron sus cómplices, quién lo auxilió y los autores intelectuales que están detrás.
Por otra parte, González Pérez negó que el agente de Seguridad Nacional, José Antonio González Ortega, haya cambiado de nombre o haya sido comisionado a una embajada en el extranjero. ``Eso es falso. Desde luego que está ubicable y ha declarado en la subprocuraduría a nuestro cargo''. El fiscal especial comentó que trató también con los legisladores el asunto de la información en poder de Pablo Chapa Bezanilla. Los documentos que la policía española le confiscó están asegurados en una caja fuerte, a disposición del juez, y ni la defensa de Chapa ni la PGR han tenido acceso a ella.