DESAFIO POR UN AUTOGRAFO

Miguel Angel Ramírez Ť ``Parece que el Ojitos (Enrique Meza, técnico del Neza) hizo el tour'', le comentó Claudio Suárez a sus compañeros, pues las Chivas se tardaron casi una hora en trasladarse al hotel, que está en el mismo aeropuerto. Cientos de aficionados acudieron a recibirlos y no hubo poder humano que les impidiera conseguir el ansiado autógrafo o cubrir de besos a los rojiblancos. El técnico Ricardo Tuca Ferreti de plano confesó que esto lo dejaba entre satisfecho y ``asustado'', pues entre tantos empujones los niños podrían salir lastimados.

Para los rojiblancos, que llegaron al DF para cumplir con el compromiso de ida de la final, fue imposible abandonar las salas del aeropuerto por la salida nacional. El personal de seguridad con trabajos pudo impedir que los aficionados rompieran el cerco, muchos menos abrir un camino para que los jugadores llegaran al hotel.

Alguien, insólitamente, propuso llevarlos en autobús, pero los trajeron paseando por las salas y los hicieron esperar en una de ellas, hasta que les dijeron que los trasladarían de seis en seis. Supuestamente así podrían protegerlos mejor los policías, pero fue imposible. La gente hizo su propia valla, no sólo hasta la entrada del hotel. Los jugadores tuvieron que aguantar todo hasta llegar a su destino. En el hotel se anunció una conferencia de prensa y hasta ahí lograron colarse aficionados.

Ferreti confesó que Missael Espinoza ya les había ``adelantado'' lo que les esperaba con los aficionados. Dijo que él no lo ``esperaba'', pero lo que le preocupaba era que en el afán de acercarse a sus ``ídolos'' no se midan las ``consecuencias'' y pudiera lastimarse alguien, en especial a los niños.

Missael, por su parte, señaló que fue asombroso el recibimiento, y que se confirmó una vez más que el Guadalajara ``es diferente a todos'', pues tiene ``ese cariño de la gente''. Agregó que el compromiso ahora ``es más'' y los jugadores tratarán de responder con el campeonato.

Sobre el Neza, Missael comentó que es un equipo capaz, que sale ``a jugar sin complejos''. Reconoció que le tienen respeto, pero que ellos están ``pensando más en lo que podemos hacer nosotros''.

Ramón Ramírez, por su parte, rechazó que se haya resentido de una lesión y que él, al igual ques Alberto Coyote y Gustavo Nápoles, entrenaron normalmente y podrán estar en condiciones de jugar hoy.

El mediocampista se mostró muy satisfecho también por el apoyo que han recibido de los aficionados y alentó la esperanza de que este domingo puedan regalarle lo que han estado esperando desde hace 10 años: el título.