La Jornada 25 de mayo de 1997

Si el Presidente quiere actuar como militante, que asuma las consecuencias y se exponga a la crítica, advierte Felipe Calderón

Georgina Saldierna V. Ť Ante los señalamientos del presidente Ernesto Zedillo en torno a la oposición, el dirigente nacional del PAN, Felipe Calderón, dijo ayer que si el Ejecutivo ha optado por la militancia priísta antes que por el liderazgo que el país necesita en la Presidencia, es ``bienvenido a la contienda, pero que asuma en toda su dimensión las consecuencias y se exponga a la crítica de la misma forma en la que él la ejerce''.

Al iniciarse ayer la reunión del Consejo Nacional del PAN, denunció que el PRD se ``priísa'' y sus proyectos han sido evaluados y comentados por asesores gubernamentales, pero se negó a señalar los nombres de éstos cuando se le preguntó por ellos. Ustedes, dijo a los reporteros, pueden reconstruir los hechos y publicarlos.

Dijo que, por su origen político, PRI y PRD son corresponsables del daño causado al país durante 67 años de gobiernos priístas.

En un discurso en el que evaluó el panorama político nacional y convocó a los panistas a mantenerse unidos y no desalentarse por el resultado de las encuestas en el Distrito Federal, Calderón consideró que no es ilegal y no se cuestiona que un presidente exprese sus preferencias partidistas.

Lo que resulta inadmisible es que se utilice el ``poder del Estado'' para favorecer al PRI y, al mismo tiempo, se cierre todo espacio de crítica al Presidente. Todavía ayer se expresó la crítica directa a nuestra campaña publicitaria por parte del Presidente, recordó.

Añadió que Ernesto Zedillo tiene derecho a opinar sobre la publicidad panista e incluso puede calificarla equivocadamente de engañosa. Pero ``nosotros le decimos que no ha habido mayor engaño político publicitario que el `bienestar para la familia' que él prometio en su campaña'', subrayó.

Dijo que ha surgido un elemento que requiere la mayor consideración: ``La afinidad de origen y cultura política del priísmo escindido hacia el PRD, con respecto al PRI tradicional, se ha acentuado hasta permitir el logro de acuerdos que permitan la exclusión del PAN de la arena política''.

Señaló que el acuerdo más grave que ha surgido de la colusión PRI-PRD es la exclusión de Carlos Castillo Peraza del debate entre los candidatos a la jefatura del gobierno del Distrito Federal.

Calificó el hecho como un claro retroceso en el camino a la democracia. ``Queda para la historia lo que será sin duda parte del anecdotario antidemocrático del país: en la primera elección para jefe de gobierno del DF, se excluyó del debate entre los aspirantes al candidato del partido opositor más importante en el país''.

Enfatizó que la exclusión se lleva a cabo entre ``dos ex gobernadores priístas, ambos aspirantes a suceder por la vía de la designación a Miguel de la Madrid Hurtado''.

Agregó que el ``acuerdo de exclusión'' tiene antecedentes que se clarifican a medida que pasa el tiempo, al recordar que durante el encuentro del CEN del PRD con Ernesto Zedillo se expresó la necesidad de contar con un partido de izquierda fuerte. Desde entonces, dijo, ``los proyectos perredistas eran evaluados y comentados con interlocución de asesores gubernamentales'', enfatizó.

Destacó que en el PRD se genera un corrimiento hacia la hegemonía, ya ostensible, de cuadros ex priístas. Las incorporaciones de González Pedrero, del sansorismo, de Luna Khan y otros, además de las relaciones cada vez más intensas de personajes vinculados a Gutiérrez Barrios, generan una reedición militante del PRI de los mejores años del populismo y del ``carro completo''.

El dirigente del PAN añadió que el PRD se ``priísa'' en el sentido de que desplaza de su línea y cuadros a la vieja izquierda socialista y militante, lo cual se agrava con el fallecimiento de Heberto Castillo y el corrimiento de las facciones extremas a la lucha armada.

Insistió en que dentro del PRD, puesto a salvo de la andanada dirigida durante siete meses en contra del PAN, se fortalecen y reproducen los ``códigos genéticos'' del priísmo. Incluso, recordó que ambos partidos son vistos como ``primos-hermanos'' por militantes del propio PRI.

Ante estas circunstancias y el deseo de parar el avance del PAN, consideró que es lógica la colusión PRI-PRD, luego de señalar que su partido no renunciará al derecho y al deber de desenmascarar a sus adversarios. Ello se hará de manera prospectiva, presentando sus ideas y sus propuestas, y de forma retrospectiva, recordando al ciudadano quiénes son los que lo gobiernan o pretenden gobernarlo.

En este sentido, añadió que ``el PAN presentará el recuento doloroso de lo que han significado los gobiernos priístas, y no sólo de ahora, sino desde que los dirigentes perredistas eran dirigentes priístas y cómplices militantes de la larga agonía nacional que estos gobiernos han significado''.

Felipe Calderón aseguró que, a nivel nacional, las encuestas muestran el repunte del PAN, por lo cual pidió a los panistas no desanimarse con los resultados del Distrito Federal. Señaló que los 45 días que quedan de la campaña son más que suficientes para consolidar una estrategia ganadora, no sólo en los estados donde habrá elección local, sino también en la batalla por el Congreso.