Militar español tratará aquí sobre Chapa y etarras
Braulio Peralta, corresponsal, Madrid, 18 de mayo Ť La extradición de presuntos etarras afincados en México, la detención en España del ex fiscal Pablo Chapa Bezanilla y asuntos relacionados con el narcotráfico son los temas que el jefe del Estado Mayor español, el general Santiago Valderas, sostendrá en la entrevista que este lunes tiene prevista con el presidente Ernesto Zedillo.
Fuentes oficiales confirmaron que el funcionario español se reunirá con el secretario de la Defensa Nacional, general Enrique Cervantes; con el procurador general de la República, Jorge Madrazo, y con el canciller José Angel Gurría, con quienes buscará lograr un mayor entendimiento en materia de cooperación en la lucha antiterrorista y en el combate al narcotráfico.
El general Valderas viajó a México la noche del sábado, acompañado de una delegación militar española que, según fuentes diplomáticas, a su llegada al aeropuerto Benito Juárez, fueron escoltados por fuertes medidas de seguridad hasta céntrico hotel capitalino y en medio de la más absoluta discreción.
Independientemente de la detención el viernes de Pablo Chapa Bezanilla, la comitiva militar preparaba el viaje oficial con
días de antelación. Sin embargo, las mismas fuentes diplomáticas señalaron la obviedad de los temas, teniendo en cuenta el proceso de extradición a España del presunto etarra Oscar Cadenas -del cual la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) dio su beneplácito durante la visita de los reyes de España a Zacatecas.
El jefe del Estado Mayor es el máximo rango concedido a un general en España; representa el mando de la cúpula militar de las tres armas (tierra, armada y aviación). El gobierno del presidente José María Aznar se ha mostrado sensible ante las autoridades mexicanas por el asunto Chapa Bezanilla, en prisión incondicional en la cárcel de Carabanchel. El propio Ministro del Interior, Jaime Mayor Oreja, apenas se dio la detención el pasado fin de semana, llamó por teléfono para dar la noticia al secretario de Relaciones Exteriores, José Angel Gurría.
Por otra parte, España ha concedido recientemente la extradición de Ricardo Armas Arroyo, lugarteniente de Carlos Cabal Peniche. Y en el caso de Angel Isidoro Rodríguez, El Divino, preso en la cárcel de Soto del Real, sólo falta esperar, dicen fuentes seguras, alrededor de dos meses más para que el Consejo de Ministros conceda la extradición a México. (Los dos son ciudadanos mexicanos acusados de delitos fiscales).
Desde luego, España quiere más extradiciones de presuntos etarras en México. Cuando se dio a conocer la extradición de Oscar Cadenas, el ministro de Relaciones Exteriores, Abel Matutes, expresó en los medios de comunicación su beneplácito por la medida mexicana, y a la espera de ``un mayor entendimiento en materia de terrorismo''.
Como se sabe, México y España suscribieron en 1995 un Tratado de Extradición y Asistencia Mutua en materia penal, mismo que fue ratificado por nuestro país el 19 de marzo de 1997, según consta en el decreto presidencial del Diario Oficial de la Federación. Tratado modificatorio en el cual se incluyen delitos como el tráfico de armas y drogas, terrorismo, actos fiscales ilícitos y lavado de dinero.
La visita del general Santiago Valderas y su comitiva militar no puede ser más elocuente y oportuna: la detención y posterior prisión incondicional de Pablo Chapa Bezanilla, ex fiscal especial de los casos Colosio y Ruiz Massieu, de la Procuraduría General de la República, así lo demuestran. Apenas el sábado, la agregaduría para la Unión Europea y Suiza de la PGR, con sede en esta ciudad, mostró su satisfacción por los sucesos al Servicio de Información Exterior de la policía española.
Ahora, México tendrá que negociar algunas de las peticiones de las autoridades españolas: la extradición de presuntos etarras afincados en nuestro territorio. Como llegamos a informar, en un documento
interno del Ministerio de Asuntos Exteriores español -publicado por este diario- señalábamos la queja del gobierno de José María Aznar: ``México no ha resuelto satisfactoriamente todavía nuestras demandas... en aquel país residen aproximadamente unos 150 miembros y simpatizantes de ETA, algunos de los cuales han sido acusados de graves delitos... y para quienes se han cursado las correspondientes demandas de extradición a las autoridades mexicanas... hay una clara asimetría en perjuicio de los intereses españoles...''.
Nadie nos pudo comprobar, sin embargo, si uno de los propósitos de la visita oficial es la extradición efectiva del presunto etarra Oscar Cadenas, hecho que podría ocurrir oficialmente en estos días.