La Jornada 10 de mayo de 1997

Disminuyeron estos ilícitos al corregirse errores del pasado, expuso

La Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) rechazó que en México haya impunidad y práctica sistemática de actos de tortura y sostuvo que ese tipo de ilícitos han disminuido en los últimos años en el país, al corregirse ``errores del pasado''.

La cancillería detalló que ``tan no hay impunidad en México'' que de más de 105 recomendaciones emitidas por la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH), en las que se acreditó tortura, 72 fueron cumplidas en su totalidad, 32 de manera parcial, dos recientes están pendientes y sólo una no fue aceptada por el Tribunal Superior de Justicia del estado de Sinaloa.

A partir de esas recomendaciones, añade la SRE, se ejercitó acción penal contra 53 servidores públicos por el delito de tortura y, lo mismo en 14 casos de homicidio cuyo origen fue ese ilícito.

Esto acredita ``la férrea voluntad del gobierno mexicano por erradicar esa práctica y eliminar la impunidad'', precisa la dependencia en un comunicado en el que advierte asimismo que las informaciones de agencias de prensa --publicadas un día antes--, en las que se da cuenta de algunas de las recomendaciones del Comité contra la Tortura de la Comisión de Derechos Humanos de las Naciones Unidas, omitieron señalar los aspectos positivos.

Entre éstos, los esfuerzos que ha realizado el gobierno del presidente Ernesto Zedillo por perfeccionar el estatuto legal de protección de las víctimas de tortura, es especial las nuevas disposiciones sobre restitución, compensación y rehabilitación de las víctimas de violaciones a los derechos humanos.

Ese comité ``destaca también la importancia del conjunto de iniciativas y actividades de educación y formación en materia de derechos humanos, dirigidos a un ámbito muy amplio de actividades públicas en las que suelen ocurrir violación de esos derechos''.

La cancillería destaca asimismo que no puede olvidarse que ``México ha avanzado en su lucha contra la tortura, se han corregido errores del pasado'' y los resultados positivos son evidentes: la disminu- ción de ese tipo de prácticas, según consta en las cifras de la CNDH.

En ese sentido, la SRE precisa que en su primer año de creación, la CNDH reportó 446 quejas por tortura, que equivalen a 13.7 por ciento del total de las quejas recibidas, cifra que colocó a esa práctica en el primer lugar entre las violaciones a la garantías fundamentales. Pero año con año la cifra fue decreciendo.

Así, entre junio de 1995 y mayo de 1996, de 8 mil 357 quejas recibidas por la CNDH, 0.7 por ciento fue por tortura. Se trató de 59 quejas, que ocuparon el lugar 17. Y para el periodo comprendido entre junio y diciembre de 1996 las 35 quejas registradas ubicaron a ese tipo de prácticas delictivas en el lugar 23.