Operarán en la frontera 21 agentes de la DEA, indican fuentes oficiales
David Aponte Ť Las autoridades de México y Estados Unidos establecieron la participación de 21 agentes de la agencia antidrogas estadunidense (DEA) en labores de intercambio de información e inteligencia en la frontera común. Los oficiales residirán en suelo estadunidense pero podrán ingresar temporalmente a territorio nacional para coordinar sus labores con sus contrapartes mexicanos.
Las negociaciones entre la cancillería mexicana y el Departamento de Estado estadunidense tardaron entre tres y cuatro meses, y el acuerdo de los grupos fronterizos tuvo lugar antes de la celebración de la 14 reunión de la comisión binacional, aseguraron fuentes oficiales mexicanas.
En reciprocidad, el gobierno de México colocará unos 60 agentes antinarcóticos mexicanos en la franja fronteriza, con iguales atribuciones que sus contrapartes de la DEA. Los oficiales de ambos países podrán cruzar la frontera las veces que sea necesario para realizar sus tareas, indicaron.
Con el nuevo convenio, las autoridades de ambas naciones buscan el despliegue de un esfuerzo institucional ``transparente y regulado'' de enlace e intercambio de información, mencionaron las fuentes.
Los nuevos elementos de la DEA y los agentes mexicanos sólo podrán realizar labores de envío de datos e inteligencia y estarán acreditados en los consulados fronterizos de los dos países, con las prerrogativas diplomáticas consideradas en la Convención de Viena de 1963. Cualquier otra actividad, como persecución de criminales o participación en operativos antidrogas, quedó descartada, explicaron.
Las seis fuerzas de tarea antinarcóticos tendrán sus bases en Tijuana, Ciudad Juárez, Matamoros y Laredo. Las partes estarían por definir las dos plazas restantes, que podrían ser Reynosa y Nogales, según reportes de la representación diplomática estadunidense.
Desde octubre de 1992 el personal de la DEA está distribuido en el Distrito Federal y cinco estados del país. Los oficiales gozan de inmunidad en las jurisdicciones civil, administrativa y penal. A partir de esa fecha, la agencia estadunidense acreditó a 39 agentes y 12 técnicos y administrativos en territorio mexicano.
En la actualidad el personal de la DEA está adscrito de la siguiente forma: tres en función de directivos en la embajada de Estados Unidos; 14 en la ciudad de México; cuatro en Guadalajara, Jalisco; tres en Mérida, Yucatán; cinco en Hermosillo, Sonora; cinco en Mazatlán, Sinaloa, y cinco en Monterrey, Nuevo León. Los 12 técnicos y administrativos pueden cambiar su residencia en esas plazas.
A partir del acuerdo alcanzado entre los dos países, antes de la reunión binacional, la DEA incorporará a 21 elementos más en la zona fronteriza, en grupos de tres o cuatro, según las necesidades de la lucha antinarco, explicaron las fuentes mexicanas.
En forma adicional, las partes estarían por acordar la acreditación y la ubicación de 12 agentes más para la zona centro de la República Mexicana. Este último asunto sí fue tema de conversación en la reunión binacional.
Las fuentes mexicanas mencionaron que los gobiernos de México y Estados Unidos buscan llegar a las ``extensas redes'' del narcotráfico que operan en ambos lados de la frontera y a la detención de los jefes de las mafias, con estrategias y proyectos comunes.
De tal forma, las partes analizan ``el fortalecimiento de la zona norte. Esto es importante porque antes no teníamos estos grupos y esa ha sido la discusión. Esta (negociación) llevó varios meses, tres o cuatro meses. También se está viendo cómo se le va hacer con esta gente que es la que está en mayor riesgo''.
Una fuente de alto nivel del Departamento de Estado consideró que los agentes de la DEA asignados a la zona fronteriza corren un ``altísimo peligro''. Una prueba de esa situación es la muerte de 200 agentes antinarcóticos mexicanos en 1996. Por esa razón, el gobierno de Washington busca una protección adecuada para los elementos estadunidenses que estarán adscritos a la región.