La Jornada 30 de abril de 1997

Protestas en Río de Janeiro por la privatización de una minera; 29 heridos

Dpa, Ansa, Efe, Ap, y Reuter, Río de Janeiro, 29 de abril Ť La Policía Militar brasileña reprimió hoy aquí con gases lacrimógenos y carros hidrantes a varios miles de personas que se manifestaron contra la privatización de la estatal minera Compañía Vale do Río Doce con saldo de 29 heridos, entre ellos nueve periodistas y dos diputados.

Aunque el Banco Nacional de Desarrollo Económico y Social (BNDES), anunció anoche la suspensión de la privatización de la compañía alegando la gran cantidad de recursos judiciales presentados contra la operación, las autoridades mantuvieron programada la primera subasta de la minera, fijada inicialmente a las 10 de la mañana de este martes.

El BNDES indicó que hasta anoche, diversos tribunales habían emitido 18 fallos ordenando la suspensión de la subasta de Vale, pero destacó que 15 de esos dictámenes ya habían sido revocados. El gobierno, que a lo largo de la jornada movilizó en todo el país, incluso en aviones fletados, a un equipo de 600 abogados para anular las medidas judiciales contra la polémica privatización, se había dado de plazo hasta la cinco de la tarde a fin de mantener la subasta para este martes.

Pero el gobierno del presidente Fernando Henrique Cardoso no sólo fracasó en su intento por lograr que los tribunales revocaran los fallos contra la venta de la estratégica minera; en un esfuerzo de última hora por mantener la fecha inicial de la subasta, el ministro de Planificación, Antonio Kandir, dijo esta noche que el gobierno presentaría una contrademanda ante el Supremo Tribunal Federal (STF) para unificar todos los interdictos, que se estiman ascienden a un centenar, y anularlos en un sólo proceso.

El alto tribunal rechazó la moción y desechó una apelación contra las prohibiciones de venta de Vale, promulgadas el viernes por dos juzgados de Sao Paulo y ratificadas hoy mismo por el principal tribunal de esa ciudad.

El presidente del STF, Romildo Bueno de Souza, alegó que antes de un pronunciamiento definitivo del máximo tribunal del país se requiere que el principal tribunal de Sao Paulo discuta el asunto en una nueva sesión, inicialmente prevista para dentro de una semana.

Las protestas

La Policía Militar desplegó desde primera hora unos 850 efectivos en torno a la céntrica y tradicional Plaza XV de Noviembre --sede de la Bolsa de Valores carioca, donde estaba programada la subasta de Vale-- en previsión de manifestaciones de opositores al proyecto, decenas de los cuales mantuvieron una vigilia en las escaleras de la vecina Asamblea Legislativa del estado de Río de Janeiro.

``Vender la Vale es vender Brasil'', ``Lo que es del pueblo no se vende'', y ``reacciona, Brasilia'', eran las principales consignas que podían leerse en los carteles que portaban los manifestantes.

La Plaza XV se convirtió horas después en escenario de una batalla campal entre uniformados y miles de sindicalistas, así como militantes de los opositores Partido de los Trabajadores, Partido Democrático Trabalhista y Partido Comunista de Brasil, quienes también portaban banderas brasileñas.

La Policía Militar, con bombas de aturdimiento, gases lacrimógenos y carros hidrantes, dispersó a los manifestantes, que respondieron lanzado piedras. Al menos 29 personas resultaron heridas, entre ellas nueve periodistas, dos diputados del Partido Comunista y ocho uniformados. Cinco de los heridos permanecían esta noche hospitalizados; el caso más grave fue el del sindicalista Anderson Ferreira da Silva, a quien se le reimplantaron tres dedos de la mano izquierda, arrancados por fragmentos de una bomba de gas lacrimógeno.

Mientras, en una ceremonia en Brasilia, Cardoso bromeó con las dificultades que su gobierno enfrenta para lograr la privatización de la Vale, a la que incluso se opone la Iglesia católica,. ``¿Vale, hoy'', ``¿Vale lo qué?, ``¿Vale ticket-alimentación?'', preguntó a sus interlocutores, quienes insistían en saber si estaba tranquilo respecto a la subasta de privatización de la minera. La respuesta fue otro chiste: ``estoy siempre tranquilo''.

Asesores presidenciales indicaron que Cardoso está informado de todos los pasos de la privatización, desde las cuestiones judiciales hasta manifestaciones contrarias a la venta de la empresa.

Vale, vale

Creada en 1942, la Compañía Vale do Río Doce, con sus 15 mil empleados, es realmente un complejo de 57 empresas que no operan sólo en minería, sino también en la operación de puertos, transporte ferroviario y naval, siderurgia y producción de papel y celulosa. La empresa de minería del grupo realiza prospecciones en más de 350 mil kilómetros cuadrados del territorio brasileño, un cuatro por ciento de la superficie del país. Entre esas áreas figura el yacimiento de Carajás, donde se ubica la mayor reserva de mineral de hierro del planeta, cuyos 38 mil millones de toneladas bastan para abastecer al mercado por cuatro siglos.

La empresa es además la mayor productora de oro de América Latina --17.5 toneladas en 1996-- y recientemente descubrió una prometedora mina en el amazónico estado de Pará, cuyas reservas superarían las 150 toneladas. Vale tiene un valor estimado en 10 mil millones de dólares; el gobierno pretende subastar la minera con una base de 2 mil 600 millones de dólares, pero espera recaudar al menos 5 mil millones por 45 por ciento de las acciones, en lo que sería la mayor privatización de la historia brasileña.