La Jornada 9 de abril de 1997

El grupo Salinas, socios y negocios, en un programa televisivo en EU

Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 8 de abril Ť ¿Cómo pudo ser que Carlos Salinas no estuviera enterado de la corrupción a su alrededor y del papel de su hermano Raúl en ella?, fue la pregunta con la cual concluyó un reportaje televisivo del programa Frontline sobre México esta noche. El programa de una hora incluyó entrevistas con Paulina Castañón, Adriana Salinas, Antonio Lozano, Jorge Hank Rhon y Raúl Salinas por teléfono, y sólo imágenes de Carlos Salinas en Dublín. Pero la columna vertebral del programa fue presentada por el jefe de operaciones antinarcóticos de la Policía Federal suiza, Valentín Roschacher, quien advirtió: ``estamos más convencidos que cuando iniciamos este caso de que el dinero (de Raúl Salinas) es dinero de droga''

-¿Tiene testigos?, preguntó el entrevistador.

-Sí. Tenemos testigos. Espero que aún estén vivos -respondió el policía suizo.

Con una imagen de Carlos Salinas en Dublín, el programa -producido por Frontline para la cadena PBS con el título ``Asesinato, dinero y México: la subida y caída de los hermanos Salinas''- empieza con la declaración: ``la historia de cómo el arresto de Raúl Salinas ha expuesto un legado de corrupción y decadencia que fue el lado oscuro de la presidencia de su hermano''. De hecho, a Carlos Salinas se le identifica como ``el hombre más odiado por su pueblo''.

El programa hace un recuento del curso de los hechos clave desde el fin de la presidencia de Carlos Salinas y las acusaciones formales contra Raúl en torno del asesinato de José Francisco Ruiz Massieu. Se abordaron también temas sobre el enriquecimiento inexplicable y mapas sobre las áreas de influencia y ubicación de los principales cárteles de la droga mexicanos.

Hablando en inglés ante la cámara, Paulina Castañón defendió a su marido: ``cometió muchos errores, pero no es un asesino''. Al pasar imágenes de Raúl con su amante en un yate, Castañón continuó: ``no siempre era un buen marido''. Pero al preguntarle sobre las cuentas en Suiza, afirmó: ``nunca le hice preguntas, las mujeres mexicanas no les hacen preguntas a sus maridos'', y concluyó diciendo que Raúl afirmó que el dinero era legal. ``Yo confío en mi marido''.

En constantes secuencias durante la entrevista con Roschacher, el programa presenta otra conclusión sobre la corrupción durante la presidencia de Salinas. ``Estoy convencido de que conoceremos, muy pronto, toda la verdad'', sobre el dinero de Raúl Salinas, afirmó. No obstante, el elemento central del programa fue el debate sobre la presidencia de Carlos Salinas y sus consecuencias.

John Womack, profesor de historia en Harvard, comenta que ``el grupo Salinas fue uno de los pocos que en verdad tenía una visión estratégica''.

Rudiger Dornbusch, economista de MIT, calificó a Carlos Salinas como un ``estratega sumamente inteligente. Si encabezara una empresa, uno compraría sus acciones''.

Pero el periodista del Miami Herald, Andrés Oppenheimer, ofreció otra perspectiva. Señaló las enormes fortunas generadas por la privatización y el vínculo directo entre la cúpula política y la empresarial beneficiada por las políticas de Carlos Salinas de Gortari.

Jorge Castañeda agregó que ``él hizo más daño a este país que cualquier otro presidente reciente de México'', y afirmó que el juicio de la opinión pública sobre el ex presidente es la correcta.

El programa describe a los beneficiados por la privatización y la multiplicación de multimillonarios en México. Presenta una breve entrevista con Jorge Hank Rhon -entre sus animales salvajes-, y quien comenta que ha tenido buena suerte económica porque ``amo el éxito''. Describe a su padre, Carlos Hank González, como buen político porque es ``un muy buen hombre''.

De su propia riqueza dijo que es resultado de que ``le gusta trabajar duro''. Pero a través de Hank Rhon y Carlos Peralta, el programa traza los vínculos entre estos multimillonarios y la familia Salinas, e incluye comentarios sobre las investigaciones de los bancos internacionales que apoyaron sus negocios internacionales, entre ellos Citibank.

El programa mostró en varias ocasiones una gráfica que traza los traslados y los vínculos de millones de dólares de Raúl Salinas a cuentas en Nueva York, Suiza y varios países más. Roschacher comentó que los suizos han bloqueado poco más de 100 millones de dólares en las cuentas de Raúl, pero agrega que podría haber mucho más dinero en juego. ``Podrían ser 200, 300 y hasta 500 millones'' de dólares, afirmó.

Para Womack lo que está en juego es mucho más que la culpabilidad de los dos hermanos. ``Lo que está en juego es si las reformas que surgieron en los ochenta serán destruidas'', dijo el historiador y agregó: ``si el gobierno de Estados Unidos comprueba que Raúl estaba involucrado en esto y que Carlos estaba involucrado en esto, yo creo que eso pondría fin al grupo Salinas''.