La Jornada 29 de marzo de 1997

Aprobó la ONU el envío de una fuerza militar a Albania

Ansa, Reuter y Afp, Nueva York, 28 de marzo Ť El Consejo de Seguridad de la Organización de las Naciones Unidas aprobó hoy el envío a Albania de una fuerza militar internacional de unos 2 mil 500 efectivos para garantizar la entrega de ayuda humanitaria en el país balcánico.

Tras una prolongada discusión, los miembros del Consejo de Seguridad, con la única abstención de China, votaron a favor del traslado de tropas a Albania lo más pronto posible, al considerar que el agravamiento de la situación no admite demoras, debido a que la antigua nación comunista sólo cuenta con víveres para los próximos seis o siete días.

El embajador italiano ante la ONU, Francesco Paolo Fulci, señaló que la iniciativa, aprobada a petición del presidente albanés, Sali Berisha, está encaminada principalmente a garantizar la entrega de ayuda humanitaria a los cientos de miles de personas que ya comienzan a sufrir la escasez de alimentos, ante la anarquía que reina en el país a raíz de levantamientos de civiles por el quiebre de financieras basadas en sistemas piramidales, que afectaron a uno de cada tres albaneses.

La fuerza multinacional tendrá un mandato de tres meses y sus hombres estarán autorizados para recurrir a la fuerza en caso necesario, pero hasta ahora no se precisó la fecha en que comenzará sus operaciones.

Por otra parte, cuatro personas murieron ahogadas y otras 20 se encontraban desaparecidas después que una embarcación repleta de refugiados albaneses chocó contra una corbeta que intentaba impedir su llegada al sureño puerto italiano de Brindisi.

El Ministerio de Defensa subrayó que la operación para interceptar a los refugiados se hizo según un convenio firmado recientemente con Albania para evitar la llegada a Italia de prófugos de la justicia.

En tanto, 18 comités de insurrectos de 14 ciudades del sur y, sorpresivamente, de cuatro del norte, convinieron con la oposición en exigir la destitución de Berisha, la revocación del estado de emergencia, además de pedir el restablecimiento de la libertad de prensa.

Las partes declararon su distanciamiento de las bandas armadas, supuestamente organizadas por Berisha, a la cuales acusaron de los asesinatos y demás actos de violencia ocurridos recientemente para, según los sublevados, desacreditar al movimiento de insurrección, surgido a raíz de la quiebra de las cajas de ahorro piramidales.