La Jornada 29 de marzo de 1997

Por delitos contra la salud, 95% de los reos federales indígenas: INI

Martha García Ť Del total de la población penitenciaria de origen indígena, 4 mil 079 corresponden al fuero común y 598 al fuero federal; de estos últimos, 95 por ciento son casos relativos a delitos contra la salud, reveló el Instituto Nacional Indigenista (INI). Datos de su Dirección de Procuración de Justicia indican que del conjunto de sentenciados y procesados, 159 son mujeres; en tanto que 39 cumplen sus penas en la Colonia Penal Federal Islas Marías.

En los reportes de 1996 con que cuenta el INI, en el ámbito del fuero común procesaron a mil 623 hombres y 47 mujeres; mientras que los sentenciados ascendieron a 2 mil 332 hombres y 41 mujeres. Esto representa 87 por ciento del total.

Por otra parte, los procesados y sentenciados dentro del fuero federal representan 13 por ciento del total. De los primeros, 174 son hombres y 25 son mujeres; de los segundos, 350 son hombres y 46 son mujeres.

Al comentar estas estadísticas, el subdirector de Asuntos Penales del INI, Eduardo Martínez Loyola, dijo que el perfil de esta población responde al esquema de pobreza. Entre ellos, analfabetos, trabajadores sin ingresos fijos, más de 50 por ciento empleados en labores del campo.

Sobre los delitos contra la salud, apuntó que las grandes organizaciones de narcotraficantes utilizan a los indígenas para transportar la droga, a quienes se conoce como burreros y cada vez más recurren a menores.

En entrevista, puso énfasis en el último estudio del instituto (1995) sobre la revisión de 135 sentencias: de ellas, 92.6 por ciento por delitos contra la salud. Sobre los resultados, agregó que el grueso de esa población (más de 87 por ciento) tienen entre 18 y 45 años de edad.

Del perfil de los sentenciados, el documento señala que 24 son analfabetos, 45 sin primaria completa, 24 con primaria terminada y sólo cuatro cursaron estudios superiores. Los campesinos registrados fueron 59, jornaleros 8 y comerciantes 7.

Por otra parte, el escrito del INI añade que en 67 por ciento de los casos sus percepciones económicas alcanzan un ingreso diario de entre 20 y 30 pesos. De los 135 sentenciados sólo tres son mujeres; en otro aspecto, 62 son casados.

Dentro del aspecto jurídico, anota que 77 por ciento son primodelincuentes, 15 por ciento reincidentes y uno por ciento ``habituales''; 68 por ciento de las aprehensiones fueron hechas por la Policía Judicial Federal y más de 87 por ciento fueron detenidos en flagrancia; 82 por ciento por posesión de mariguana, 10 de cocaína y 8 de amapola.

Del número global reportado por el INI, de 4 mil 079 personas como población penitenciaria indígena, su origen étnico se establece en los grupos: nahua (mil 114), zapoteco (487), maya (420), totonaca (268), mixteco (234), otomí (218), tarahumara (172), chinanteco (159), tzotzil (153) y mazateco (148).

Los altos números corresponden a la mayor densidad de hablantes de lenguas indígenas en el país: nahua, 22.67 por ciento; zapoteco, 7.64; maya, 14.11, totonaca, 3.94; mixteco, 7.32; otomí, 5.31; tarahumara, 1.03; chinanteco, 2.07; tzotzil, 4.34, y mazateco, 3.19.

Respecto al lugar de origen de esta población, se enlistan, en orden decreciente: Oaxaca, Veracruz, Puebla, Chiapas, Yucatán, Chihuahua, Nayarit, San Luis Potosí, Guerrero e Hidalgo; la mayoría, en los 10 primeros estados de alta población indígena en el territorio.