Descarta la UE una intervención militar en Albania
Reuter, Afp, Ansa, Ap, Dpa y Efe, Apeldoorn, 16 de marzo Ť La Unión Europea descartó hoy una intervención militar en Albania, pero decidió enviar una misión diplomática de urgencia para evaluar la situación, mientras que el puerto albanés de Durres fue escenario de nuevos enfrentamientos entre la policía y miles de civiles que asaltaban desesperados los fondeados barcos en los puertos del sur del país para dirigirse a las vecinas Italia o Grecia.
Según testigos, la policía disparó nuevamente contra miles de personas que se aglomeraban en Durres para intentar apoderarse de varios barcos anclados a escasas millas de la ciudad para evacuar a extranjeros residentes en Albania.
Entre la población circulaban versiones contradictorias acerca de un número indeterminado de muertos y heridos, sin que se hubieran confirmado oficialmente. El sábado, en un hecho similar, la policía arremetió contra la población que pretendía huir de la violencia, dejando un saldo de cuatro personas muertas.
El éxodo de albaneses que huyen de la violencia hacia los puertos italianos de Brindisi y Bari continuaba este domingo, y la llegada de otros mil 200 albaneses en las últimas horas elevó a 4 mil el número de refugiados que buscaron acogida en Italia en los últimos cuatro días.
El primer ministro italiano, Romano Prodi, quien llegó a Brindisi para evaluar la situación de los refugiados, aseguró que Europa está comprometida a ayudar en la reconstrucción de Albania y a contener el éxodo de albaneses.
``La crisis no se resuelve escapando, sino reconstruyendo'', dijo, y añadió que Europa proporcionará las condiciones materiales para que esto suceda.
Los refugiados han sido ubicados en los llamados centros de hospitalidad preparados en escuelas, oficinas y barracas militares, pero el alcalde de Brindisi, Lorenzo Maggi, indicó que la situación se está desbordando.
La escenas de violencia y confusión en Durres contrastaban con la calma en Tirana, donde la población guardó día de luto en memoria de más de cien personas fallecidas desde que comenzaron los disturbios, hace poco más de dos meses, luego de la quiebra de financieras de sistema piramidal que dejó en la ruina a uno de cada tres albaneses.
Más de cuatro mil personas que coreaban ``paz, paz, paz'' se congregaron en la plaza central de la capital albanesa, donde se inició el levantamiento popular, para deplorar las muertes habidas y procurar el fin de la anarquía.
Algunos manifestantes ocuparon pacíficamente varios coches policiales dispuestos para mantener el orden, tomaron de la mano a varios policías y los invitaron a participar en la marcha.
En Valona, corazón de la revuelta, también se efectuó una manifestación por la paz, pero en la localidad sureña de Korca otros cuatro habitantes murieron en circunstancias aún no esclarecidas.
El papa Juan Pablo II oró también por la paz en Albania y pidió a la comunidad internacional que intervenga, y a los albaneses que depongan las armas.
Karol Wojtyla señaló que la crisis que ha sacudido a este país, recientemente salido de un largo periodo de dictadura, se ha extendido a todo el territorio, lo cual ha sumergido a la población en la inseguridad total.
No a la intervención militar: Unión Europea
En este contexto, la UE decidió el envío de una delegación de expertos que determinará si es necesario organizar una misión de asesores económicos, militares y policiales para ayudar a las autoridades de Albania a restablecer el orden.
El canciller italiano, Lamberto Dini, informó que la delegación diplomática representa un programa global y no tiene un enfoque militar, y destacó que el objetivo es ayudar a las autoridades albanesas a restablecer las funciones del Estado, las fuerzas de seguridad y reconstruir las infraestructuras.
La decisión de descartar una intervención militar y optar por la observación prudente de la evolución de los acontecimientos fue tomada por los 15 ministros de Asuntos Exteriores de la UE reunidos desde ayer en Apeldoorn, Holanda, país que ejerce la presidencia en turno de Los Quince. ``Se optó por la vía prudente, que tiene en cuenta las trampas que podría esconder una operación militar'', señaló el canciller holandés, Hans van Mierlo.
Agregó que la delegación viajará mañana mismo a Tirana, aunque el titular de Asuntos Exteriores de Alemania, Klaus Kinkel, advirtió que todo dependerá de si los albaneses mantienen abierto el aeropuerto de la capital.
El embajador holandés Jan D«Assembourg encabezará la delegación europea, que incluirá a representantes griegos e italianos, entre ellos expertos militares de la Organización para la Seguridad y Cooperación en Europa (OSCE) y la Comisión Europea, pero no se estableció un plazo para que la delegación entregue su análisis al consejo de ministros de la UE. Aunque la declaración habla de la disposición de la UE por vía de la Comisión Europea para aportar una sustancial ayuda económica a Albania --condicionada a un previo restablecimiento del orden-- se descartaría la posibilidad de asumir el pago de la quiebra de las financieras por sistema piramidal, lo que arruinó a gran parte de la población.
El gobierno albanés aplaudió la decisión de la UE, y en un mensaje televisado, el primer ministro Bashkim Fino y el presidente Sali Berisha externaron su satisfacción y manifestaron su decisión de seguir trabajando para intentar resolver la crisis.
Mientras, el gobierno de Fino dio hoy los primeros pasos para volver a poner en marcha la economía del país. El primer ministro anunció en un comunicado que a partir del lunes se reanudará el funcionamiento de la administración estatal, aunque en un principio con una jornada laboral reducida entre las 08:00 y las 15:00 horas locales.
Por lo pronto, el presidente Berisha anunció la amnistía para Fatos Nano, líder socialista opositor que cumplía cadena perpetua por presunta corrupción, quien sin embargo quedó en libertad el pasado viernes cuando las autoridades carcelarias abandonaron sus puestos, lo que posibilitó una huída masiva.
En Valona, en tanto, se realizó la primera reunión entre el comité de sublevados y el nuevo gobierno de reconciliación, representado por el ministro de Finanzas, Arben Malaj. No se informó sobre los resultados del encuentro.
La oposición albanesa apoyaba este domingo, aunque implícitamente, la permanencia de Berisha, pues teme que su partida antes de las elecciones legislativas, programadas para junio entrante, complique aún más la situación.
Además, el Parlamento, que ha sido abandonado por la mayoría de los legisladores y boicoteado por la oposición, no se encuentra en condiciones de elegir a un sucesor.
Por otra parte, el comité de defensa de Patos, aldea cercana a Fieri, confirmó que ayer fueron sustraídas diez planchas de material altamente radiactivo tras el asalto y saqueo de un cuartel por bandas de civiles alzados.
Las emisoras albanesas han advertido que el material se encuentra en contenedores que parecen plásticos, y sin referencia alguna a su contenido.