La Jornada 15 de marzo de 1997

Sin respuesta, 45 barrenderos de Tabasco se retiran de la CNDH

Triunfo Elizalde Ť El grupo de barrenderos de Tabasco que el pasado jueves ocupó durante 13 horas la explanada y el área de recepción del edificio de la Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) y luego se mantuvo frente a la institución esperando ser llamado por alguno de los visitadores generales para iniciar el análisis de su denuncia de incumplimiento de la cláusula 6 de los acuerdos de enero por parte de las autoridades tabasqueñas, decidió retirarse ayer por la tarde ``para contribuir a encontrar una salida negociada al problema''.

Aunque nunca fueron llamados por ninguna autoridad de la CNDH, se mantuvieron en ``plantón'' hasta que su líder Aquiles Magaña llegó a informarles de sus negociaciones ante diversas instancias de poder, que ``contribuirán a resolver este problema''. Les aseguró que algunos legisladores se comprometieron a abordar su caso el próximo lunes y buscarán una salida adecuada a la situación.

Los 45 trabajadores de limpia del municipio de Centro que exigen ser liquidados conforme a la ley y lo acordado entre el gobierno de Tabasco y sus representantes, reiteran que aun cuando 61 de los 110 que iban a ser liquidados aceptaron pagos de 35 mil pesos, en realidad les corresponden entre 80 y 85 mil pesos.

Basan su protesta en la cláusula 6 que textualmente dice: ``El ayuntamiento de lCentro procederá a hacer un pago a 110 trabajadores para su liquidación conforme a derecho ante los tribunales laborales, (de acuerdo) con la relación anexa que presentarán sus representantes''.

``Es por ello -dice Magaña- que no aceptamos que el primer visitador de la Comisión Nacional de Derechos Humanos nos diga que ya todo está concluido, cuando la liquidación no se apega a lo convenido. Sólo le pedimos que lea el texto mencionado y compare los montos de los pagos hechos a 61 compañeros, respecto de lo que realmente les corresponde''.

Del acta ministerial levantada ante la agencia 25 del Ministerio Público de Magdalena Contreras, contra los barrenderos que ocuparon el jueves parte de la entrada de la CNDH, precisó que es mentira que hayan irrumpido violentamente. ``Entraron, sí, cuando menos los esperaban, quitando el candado de la reja principal, que siempre está abierto. Dicen que yo encabecé la acción, lo cual no es exacto porque me presenté al lugar de los hechos casi tres horas después''.

Agregó que ``también es inexacto asegurar que nosotros impedimos la entrada y salida de la gente que va a poner sus quejas a los funcionarios que allí laboran. Fue el equipo de seguridad, como en otras ocasiones, el que impidió la entrada y salida de personas, por supuestas medidas de seguridad'', subrayó.