La Jornada 15 de marzo de 1997

Cargamento ilegal de lanzagranadas y rifles hacia México, denuncian en EU

Jorge Alberto Cornejo, corresponsal, Tijuana, BC, 14 de marzo Ť La segunda Zona Militar, con sede en esta frontera, se declaró en estado de alerta tras conocer la versión de que cuatro tractocamiones cargados con cientos lanzagranadas y rifles de asalto habrían ingresado ilegalmente al país por la garita internacional de Mesa de Otay en los últimos días.

El teniente coronel Eduardo Vega Rivera señaló que se intensificó la vigilancia en los puntos de inspección carreteros, así como los patrullajes en las brechas, para localizar a los camiones que se habrían internado a México durante el pasado fin de semana.

La noticia sobre el contrabando de armas en esta frontera la dio a conocer el diario Union Tribune de San Diego, tras revelar que aduanales estadunidenses localizaron cerca de los límites con México dos tractocamiones cargados con cientos de fusiles tipo M-2 y lanzagranadas.

Según las fuentes consultadas por el diario, las autoridades estadunidenses consideran que las armas decomisadas son sólo una tercera parte del cargamento desembarcado en el puerto de Long Beach y que tenía como destino el territorio mexicano.

El administrador de la aduana local en esta ciudad, Rodolfo Ponce Díaz, afirmó que el cargamento pudo haber ingresado a México por esta frontera ya que diariamente entran por la garita de Mesa de Otay alrededor de mil 500 camiones de carga, y sólo se inspecciona a 10 por ciento.

Esto es, que cada mes 40 mil camiones con diversas mercancías se internan al territorio mexicano por esta frontera sin ser sujetos a ninguna inspección.

El funcionario señaló que ello se debe a que desde 1990 la Federación dispuso de un sistema aleatorio de revisión, consistente en semáforos fiscales.

Y el cónsul de México en San Diego, California, Luis Herrera Lasso, señaló que la representación diplomática del gobierno ya pidió al Departamento del Tesoro una investigación al respecto.

Destacó la importancia de que las autoridades de ambos países colaboren para determinar la procedencia de las armas y su destino, pero ello ``sólo se podrá lograr mientras se mantengan los lazos de cooperación contra los que atenta la determinación de la Cámara de Representantes que ayer reprobó a México en su lucha antinarco''.

Según la nota periodística aparecida hoy y que causó revuelo en la región, las armas -calculadas en más de mil- fueron desembarcadas en el puerto de Long Beach y mantenidas en el embarcadero administrado por la empresa Cosco, de origen chino y vinculada con el gobierno de ese país.

De allí fueron trasladas por tierra hasta la garita internacional y, por alguna razón, sólo cuatro de los seis camiones que se suponía trasladaban ganchos de ropa y herramientas ingresaron a territorio mexicano.

Las autoridades estadunidense consideran que este podría ser el envío ilegal de armas hacia México más grande en la historia, y no se descarta que estaban destinadas a surtir a grupos insurgentes de armamento moderno.