Urge un acercamiento directo entre gobierno y EZLN, señalan miembros de la Cocopa en Tijuana Llama el obispo de Tapachula a ambas partes a ``escuchar con humildad todos los planteamientos''
De los corresponsales Ť El estancamiento de las pláticas en San Andrés Larráinzar pone en peligro la paz en Chiapas y aumenta la tensión social en la zona, coincidieron el concejo municipal de Ocosingo, la Comisión de Concordia y Pacificación (Cocopa), el Frente Zapatista de Liberación Nacional (FZLN) y el obispo de la diócesis de Tapachula, Felipe Arizmendi Esquivel.
``La situación en las comunidades está un poco tensa, sobre todo porque existe un conflicto, que provocó otros conflictos al interior de la selva: hay zapatistas peleándose con la ARIC; la ARIC peleándose con la CNPI; perredistas con priístas. Existe una gran división que puede generar un conflicto incontrolable'', aseguró en San Andrés Larráinzar, Chiapas, Juan Vázquez, uno de los concejales de Ocosingo.
Insistió en que el estancamiento de las pláticas pone en riesgo la estabilidad y la paz en el estado, por lo que exhortó al presidente Ernesto Zedillo para que acepte las reformas constitucionales sobre derechos y cultura indígenas, emanados del diálogo de San Andrés Larráinzar.
En Tijuana, Baja California, el senador Heberto Castillo demandó una solución urgente al conflicto chiapaneco por parte del gobierno federal y el Ejército Zapatista de Liberación Nacional. Para ello, dijo, miembros de la Cocopa consideran necesario que sean las partes las que reanuden la interlocución directa, sin mecanismos intermedios.
Durante una reunión informativa en la frontera norte, Castillo indicó que no hay que esperar a que ``truene la bomba'' en Chiapas para tomar conciencia que el no reconocer a los pueblos indios puede generar un descontento generalizado en el país.
Además de Castillo, asistieron a la reunión los diputados Jaime Martínez Veloz, Juan Roque Flores y José Narro Céspedes.
El gobierno se ``cerró'' al diálogo
En Mérida, el FZLN señaló que el conflicto de Chiapas se encuentra cada día más tenso por la presencia del Ejército, que realiza ``ataques quirúrgicos'' en las zonas de influencia zapatista, ``cercando, como preparando una guerra en las zonas del EZLN''.
En entrevista, Elisa Benavides, Juan Guerra y Gilberto López y Rivas censuraron la actuación del gobierno del presidente Ernesto Zedillo que se ha ``cerrado'' totalmente al diálogo y a respetar la propuesta en materia de derechos y cultura indígenas emitida por la Cocopa.
López y Rivas, ex asesor del EZLN, sostuvo que el diálogo con el EZLN, suspendido desde septiembre pasado, es una muestra más de la falta de voluntad del gobierno para solucionar el problema de Chiapas, así como la imposición de los militares ``en un momento en que el país se debate en una crisis de seguridad interna''.
El diputado federal Juan Guerra, de la Cocopa, responsabilizó al presidente Zedillo de lo que suceda en Chiapas en caso de romperse el diálogo. La presencia militar es cada día más grande en la entidad y en las áreas de influencia del EZLN ``pareciera como si se preparara una guerra, en el momento menos esperado'', destacó.
El obispo de Tapachula, por su parte, hizo un llamado al gobierno para que dé signos positivos para el inicio del diálogo y señaló que ``espera que ambas partes actúen con humildad para que escuchen todos los planteamientos''. (J. Balboa, J.A. Cornejo, L. Boffil y corresponsalía de Tapachula)