La Jornada 7 de marzo de 1997

Debate en Washington: crear o no una crisis en México

Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 6 de marzo Ť El Comité de Relaciones Internacionales de la Cámara de Representantes aprobó hoy por abrumadora mayoría una resolución para descertificar a México, pero la medida ofrece al presidente Bill Clinton la opción de declarar un ``pase'' por razones de ``interés nacional vital'', que permite la continuación de la asistencia económica al país vecino.

Por 27 votos a favor y cinco en contra, legisladores republicanos y demócratas del comité aprobaron una resolución conjunta del Congreso que revocaría la decisión de Clinton de certificar que México está cooperando plenamente con los esfuerzos antinarcóticos estadunidenses. El pleno de la Cámara de Representantes tiene programado votar la iniciativa el próximo miércoles.

``La resolución ante nosotros es simple: le otorga una calificación reprobada a México en la cooperación contra las drogas, en vez de la calificación de aprobación del presidente'', declaró el titular del comité, el representante republicano Benjamin Gilman.

Más de una docena de legisladores se hicieron hoy eco de esta opinión y los cinco miembros que votaron en contra explicaron que su oposición se debió a que la resolución no era lo suficientemente dura en su condena a México.

Algunas de las críticas más severas provinieron del veterano demócrata Lee Hamilton, un representante que se percibía como apoyador de México en el Congreso. Hamilton criticó al gobierno mexicano ``por no actuar con suficiente fuerza contra los narcotraficantes, excepto cuando es presionado por Estados Unidos, por no extraditar a narcos a Estados Unidos, por no permitir que embarcaciones estadunidenses carguen combustible fácilmente en su territorio y por no autorizar que los agentes de la DEA porten armas cuando trabajen del lado mexicano de la frontera''.

La disputa sobre la renuencia mexicana a dar la autorización formal que permita que los agentes de la DEA y otros de seguridad pública porten sus propias armas en territorio mexicano, cuando trabajen con las fuerzas de tarea fronterizas, ha surgido como el tema más criticado por los legisladores.

Pero México no fue el único blanco de las críticas y legisladores de ambos partidos parecieron estar de acuerdo con el representante Gilman cuando dijo que ``a esta administración (la de Clinton) se le debería otorgar un premio Oscar Pinocho por su actuación de este año''

Varios miembros del Congreso dijeron que la administración Clinton ``ha perdido toda credibilidad en torno a su política hacia México'' y cuestionaron el porqué los funcionarios de la Casa Blanca continúan repitiendo los mismos argumentos para defender la decisión de la certificación.

Este jueves, la administración Clinton envió a varios de sus altos funcionarios al Congreso para argumentar en contra de las iniciativas legislativas para descertificar a México, y en diversos puntos los secretarios asistentes de Estado, Jeffrey Davidow y Robert Gelbard, y el subadministrador de la DEA, James Milford, comparecieron ante el comité.

Davidow insistió en tono firme que el nivel de cooperación entre México y Estados Unidos se ha incrementado considerablemente durante el último año. Pero en otra manifestación de la falta de coordinación dentro de la propia administración Clinton, el testimonio de Davidow tuvo comentarios marcadamente divergentes: ``En este momento, nosotros en la DEA no tenemos una relación de confianza con ninguna de las agencias de seguridad pública que actualmente están operando en México'', declaró Milford ante el comité. ``No tenemos una habilidad para pasar información a México y sí hemos tenido información comprometida''. Con Davidow sentado a la izquierda de él, Milford rehusó comentar directamente sobre el proceso de certificación, pero cuando fue preguntado si Estados Unidos cuenta con la cooperación de México, el funcionario de la DEA dijo que ``no''.

Provocar o no una crisis en México, la pregunta

El comité escuchó el breve testimonio del legislador por El Paso y ex agente de la Patrulla Fronteriza, Silvestre Reyes, quien a pesar de no ser miembro del comité acudió a la audiencia para argumentar en contra de la descertificación. Reyes dijo que una resolución para descertificar a México, aun con ``pase de interés nacional'', tendrá ``consecuencias profundas en la relación bilateral''.

Sin embargo, estos argumentos pasaron desapercibidos para el coro que articuló la crítica hacia México. En otra audiencia celebrada hoy, por ejemplo, el senador Ernest Hollings señaló que tal vez el único mecanismo para promover un cambio positivo en el país vecino es a través de ``causar una crisis'' en él.

``La única forma que sé para conseguir los amigos correctos allá abajo es deshaciéndose del PRI'', afirmó Hollings, casi pensando en voz alta durante la audiencia. Esta posición fue inmediatamente rechazada por el senador republicano Pete Domenici, quien respondió al comentario de su colega declarando: ``No creo que ahora sea el momento para crear una crisis mayor con México... Pienso que deberíamos hacer justo lo opuesto y mantener eso''.

La secretaria de Estado, Madeleine Albright, quien se encontraba testificando en esa audiencia ante el Senado, también expresó su fuerte desacuerdo con el senador Hollings. Al hablar a pesar de las frecuentes interrupciones del senador de Carolina de Norte, Albright señaló que ``si uno tiene a alguien viviendo en la casa de al lado, que tiene problemas serios y uno ayudó a crear un incendio en esa casa, podría crear problemas en su propio patio trasero''.

Sorpresas en la crítica al proceso de certificación

Varios funcionarios de la administración Clinton también expresaron frustración con el proceso de certificación y había evidencias de un creciente desaliento con el proceso dentro del mismo Congreso. El presidente de la Cámara de Representantes, Newt Gingrich, declaró hoy que aunque considera que la decisión de Clinton de certificar a México fue ``equivocada'', también consideró que el proceso de certificación es un ``torpe instrumento''.

Sin embargo, Gingrich añadió que si se va a continuar certificando, se debería incluir otro país en la lista. ``Hablemos de certificar a Estados Unidos'', comentó ante una agrupación del Partido Republicano.

``No es suficiente gritarle a los mexicanos y a los colombianos. Las drogas están pasando por sus países para llegar aquí. Si no estuviéramos comprando (las drogas), ellos no las estarían enviando''. Pero estos comentarios no integraron el coro general que hoy dominaba el Congreso estadunidense y varios legisladores consideraron que la resolución aprobada hoy tiene una buena probabilidad de recibir la aprobación del pleno de la Cámara. Fuentes legislativas dijeron que se ha programado votar la medida el próximo miércoles.