La Jornada 4 de marzo de 1997

El presidente peruano Alberto Fujimori realizó ayer una sorpresiva
visita a Cuba. Tras la reunión, Fidel Castro dijo que la isla está
dispuesta a recibir al comando del MRTA que mantiene a 72 rehenes en
la embajada japonesa en Lima Ť Foto: Afp

Ap, Afp, Efe y Reuter, La Habana, 3 de marzo Ť Cuba anunció hoy su disposición a recibir a los integrantes del comando del Movimiento Revolucionario Tupac Amaru (MRTA) que mantienen a 72 rehenes en la residencia del embajador japonés en Lima, a condición de que todas las partes involucradas en la crisis hagan una solicitud formal, tras un sorpresivo encuentro aquí entre el presidente peruano, Alberto Fujimori, y su homólogo cubano, Fidel Castro.

Entretanto, en Lima, la octava reunión entre el gobierno peruano y el MRTA transcurrió en un ``marco de cordialidad'', pero concluyó sin acuerdos, y el líder del comando, Néstor Cerpa, que esta vez no acudió al encuentro, calificó la gira de Fujimori de una ``payasadita''.

Fujimori abandonó la noche de este lunes Cuba luego de haber sido despedido en el aeropuerto con todos los honores de su rango por Castro, quien en breves declaraciones a la prensa dijo que la disposición de su país a acoger al comando del MRTA puede tener un costo político, ``pero es un deber moral, no una cuestión de conveniencia''.

``Si hace falta un país que los reciba, nosotros los recibiremos'', agregó antes de insistir en que Cuba no pretende ``ningún protagonismo'' y que ``si nadie nos llama, no queremos meternos en esto''.

Explicó que la veintena de rebeldes llegaría a la isla en condiciones ``normales: el respeto a la relación entre los dos países, el respeto a las leyes de la nación, no son condiciones especiales''.

El líder cubano subrayó además su buena relación con Fujimori, de quien dijo: ``siempre nos ha satisfecho el papel que ha jugado'' en las cumbres anuales iberoamericanas.

Fujimori, quien se entrevistó durante casi dos horas con Castro, llegó esta mañana de improviso a la capital cubana -acompañado, entre otros, por su vicecanciller Jorge Soto y su hijo Keny- aprovechando su viaje de regreso desde Santo Domingo, donde también trató el tema de los rehenes.

``He sido recibido por el presidente Castro con mucha comprensión'', dijo Fujimori en una conferencia de prensa en español y en inglés en una sala del Palacio de la Revolución.

Luego explicó que ``tendría que haber una solicitud formal del gobierno japonés, del gobierno peruano y de los representantes del grupo de garantes. Si así lo decidiera el grupo del MRTA, y en esas condiciones, Cuba está dispuesta a recibirlos''.

``Cuba está dispuesta a cooperar en el marco para este asilo, pero no para participar como mediador'', aclaró Fujimori. Desde el estallido de la crisis, el 17 de diciembre, Cuba ha evitado cualquier comentario público sobre el caso.

Estados Unidos declinó opinar sobre la posibilidad de que Cuba otorgue asilo a los rebeldes. ``Podemos comprender perfectamente la voluntad (de Fujimori) de hacer todo lo que sea necesario para aumentar las oportunidades de un acuerdo pacífico'', declaró el portavoz de la Casa Blanca, Micke McCurry, mientras que el vocero del Departamento de Estado, Nicholas Burns, dijo ``esperar terminar

rápida y pacíficamente, y desde luego conocen la política estadunidense: pensamos que los terroristas no deberían ser recompensados''.

De su lado, fuentes de la cancillería japonesa citadas por Ansa indicaron que Tokio confía en que ``este nuevo desarrollo de la crisis tenga efectos positivos sobre las negociaciones en curso''.

En Lima, la octava reunión entre el interlocutor oficial, Domingo Palermo, y el número dos del comando rebelde, Roli Rojas, culminó sin avances a pesar de la ``cordialidad''. ``Ambas partes están llegando a conformar sus planteamientos que, sin existir acuerdo, dejarán claramente establecidas sus posiciones'', explicó al término del encuentro el arzobispo de Ayacucho, Juan Luis Cipriani, miembro por el Vaticano de la Comisión de Garantes.

También asistieron al encuentro los otros miembros de la Comisión de Garantes: el embajador de Canadá, Anthony Vincent; el delegado de la Cruz Roja Internacional, Michel Minnig, y como observador participó el diplomático japonés Terusuke Terada.

Cipriani, quien agregó que la próxima reunión se realizará el miércoles, no explicó los motivos por los cuales Cerpa no asistió al octavo encuentro. El propio Cerpa confirmó este lunes en una comunicación por radio de onda corta que no asistió a la reunión, sin explicar los motivos. Antes había calificado de ``un show'', un ``paseo'' y una ``payasadita'' la gira del presidente peruano por el Caribe.

Los emerretistas han declarado en varias ocasiones que no quieren salir de Perú, sino regresar a la selva, y exigen negociar la excarcelación de cerca de 400 de sus compañeros presos, a lo que se niega el gobierno de Fujimori, sin que ninguna de las partes haya cambiado su postura, al menos públicamente.

Desde Madrid, el vocero internacional del MRTA, Isaac Velasco, dijo que los emerretistas no han aceptado pedir asilo en el extranjero, pero analistas peruanos consideraron que si Fujimori decidió realizar personalmente su gestión internacional, es porque las conversaciones llegaron a un punto que hizo recomendable lograr una alternativa de salida del país para el comando armado.