La Jornada 4 de marzo de 1997

El consumo en EU explica en gran medida el narcotráfico en México: ONU Repudian los 113 países No Alineados el proceso estadunidense de certificación

Afp, Ap, Dpa y Reuter, Viena, martes 4 de marzo Ť Estados Unidos continúa como el mayor consumidor mundial de drogas y América Latina sigue siendo su principal proveedor de cocaína, señaló el informe anual de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE), organismo de Naciones Unidas.

En el caso de México, señaló la JIFE, ``el cultivo ilícito de cannabis, la fabricación ilícita de metanfetamina y el tráfico ilícito de cocaína y otras drogas son problemas que en gran medida guardan relación con la situación del uso indebido de estupefacientes en Estados Unidos''.

Por otra parte, los 113 países del Movimiento de los No Alineados (Noal), presidido por Colombia, rechazaron el proceso de certificación estadunidense, en el que Colombia resultó descertificada por segundo año consecutivo.

El documento de la JIFE, divulgado este martes, subrayó que, pese a las intensas campañas estadunidenses durante la pasada década y principios de ésta para disminuir el consumo de drogas, durante ese lapso ha aumentado, sobre todo entre jóvenes estadunidenses, el uso de cocaína, cannabis y alucinógenos.

Señaló también que en Estados Unidos y Canadá han aumentado los cultivos de marihuana de invernadero, la droga de mayor uso en ambos países, así como la fabricación de drogas sintéticas derivadas de la anfetamina. La JIFE apoyó esfuerzos estadunidenses en contra de grupos que sugieren la legalización de la marihuana.

Señaló que los países latinoamericanos han realizado iniciativas importantes para erradicar el narcotráfico, y mencionó, entre otras, la creación en Perú de una nueva institución para la vigilancia de las drogas que define claramente mecanismos de control de narcóticos y responsabilidades de los traficantes.

Pero la JIFE lamentó este martes que los esfuerzos de erradicación de cultivos de coca en Lima se centren casi exclusivamente en ``plantas de semillero'' y que el proceso se realice con menos frecuencia en plantíos maduros.

Asimismo, sugirió a Colombia aprobar a la brevedad una legislación que prevea penas más severas para los delitos relacionados con el tráfico de drogas y permita la confiscación de los activos incautados, a pesar de que el Congreso colombiano aprobó estas medidas precipitadamente la semana pasada. Acerca de Bolivia comentó que a finales de año desaceleró sus erradicaciones de cultivos de coca.

En general, la JIFE exhortó a los gobiernos latinoamericanos a intensificar sus esfuerzos bilaterales y multilaterales en la lucha contra el narcotráfico, y destacó que son estos países los que sufren las consecuencias del tráfico de estupefacientes hacia Estados Unidos y Europa.

El informe señaló que a pesar de que el principal problema en América Latina sigue siendo la producción y el tráfico de cocaína, en Colombia y sus países vecinos, como Venezuela y Perú, principalmente, se han diversificado hacia la adormidera y el opio. Manifestó también preocupación por el incremento del consumo de drogas en América Latina y el Caribe.

Dijo también que los países latinoamericanos han introducido nuevas medidas administrativas para la vigilar el transporte de sustancias químicas que se emplean en la producción de drogas sintéticas.

Destacó que en todo el mundo las redes de tráfico de drogas se benefician por la corrupción, el soborno y la intimidación a policías, magistrados, políticos y autoridades; sugirió a todos los gobiernos del mundo fijar prioridades en materia de cumplimiento a leyes que combaten el tráfico, uso y venta de estupefacientes.

Para ello, recomendó la cooperación internacional en el plano jurídico y en la investigación y persecución de criminales.

Resaltó que el consumo de medicamentos de receta, como tabletas para adelgazar, sedantes y estimulantes, así como algunas medicinas para niños, han adquirido ``proporciones epidémicas'' a nivel mundial, por lo que se instó a todos los países que hayan registrado este problema a exigir mayor control en las recetas médicas.

Rechazan los Noal la certificación de EU

Por otra parte, este martes, los integrantes del Noal afirmaron su oposición al proceso de certificación estadunidense en una declaración mediante la que rechazan ``el uso continuo de mecanismos unilaterales de evaluación, calificación y certificación, porque son inconsistentes con los principios de igualdad soberana de los Estados y de la no intervención, y vulnera los instrumentos multilaterales establecidos para el efecto''.

Bogotá anunció, además, que promoverá entre sus aliados del Grupo de Río una iniciativa para solicitar a Estados Unidos eliminar el proceso de certificación''.