Demandan senadores descertificar a México
Jim Cason y David Brooks, corresponsales, Washington, 3 marzo Ť Un grupo bipartidista de senadores presentó hoy formalmente varias resoluciones encaminadas a revertir la decisión del presidente Bill Clinton de certificar que México está cooperando con Estados Unidos en la lucha contra la droga y, por otra parte, el gobierno negó aquí versiones de que México y Washington hubieran alcanzado nuevos acuerdos sobre asuntos antinarcóticos durante la última semana.
``No hay ningún nuevo acuerdo'', afirmó un alto funcionario de la administración Clinton entrevistado hoy por La Jornada. ``Tenemos muchos sobre los cuales estamos trabajando muy activamente con los mexicanos, y estamos muy comprometidos en ese proceso''.
Otro funcionario rechazó explícitamente versiones divulgadas por medios nacionales aquí en el sentido de que México habría finalizado acuerdos específicos para resolver disputas pendientes con Estados Unidos en este rubro, pero reiteró que los funcionarios mexicanos habían indicado estar dispuestos a llegar a tales acuerdos en un futuro próximo.
Sin embargo, funcionarios de la Casa Blanca cabildearon hoy en el Congreso para intentar evitar la aprobación de proyectos legislativos que buscan revertir la decisión presidencial de certificar a México. Los senadores Paul Coverdell, Dianne Feinstein y Jesse Helms introdujeron dos proyectos legislativos en favor de la descertificación de México, y sus asesores iniciaron reuniones con otros senadores para buscar una estrategia que asegure la aprobación de sus proyectos.
``México claramente ha fallado en satisfacer el criterio legal requerido para la certificación'', declaró el senador Coverdell al presentar la iniciativa de ley. ``Ambos, republicanos y demócratas, creen que el presidente debe tratar a México y la guerra contra las drogas con honestidad y sinceridad, y pido que el presidente Clinton cambie de curso inmediatamente''.
Coverdell, miembro del liderazgo republicano del Senado, se reunió hoy con la demócrata Feinstein y ambos recibieron seguridades del liderazgo máximo, según algunas versiones, de que su propuesta para la descertificación sería presentada relativamente pronto ante el pleno de la Cámara alta para el voto de aprobación.
Sin embargo, los legisladores aún están debatiendo el carácter preciso de su resolución legislativa con una de las versiones presentadas hoy, simplemente solicitando que México sea descertificado plenamente, una medida que de aprobarse requerirá que el gobierno estadunidense vote contra la otorgación de créditos a México por parte del Banco Mundial y el Banco Interamericano, y limitaría la asistencia bilateral a rubros de esfuerzos antinarcóticos.
Los senadores también presentaron una segunda resolución que propone la descertificación de México, pero incluye una cláusula otorgando al presidente el derecho de declarar que la continua cooperación con México es ``en el interés nacional vital de Estados Unidos'' (conocido como un ``pase'' de seguridad nacional) y si el Ejecutivo ejerce esta opción, las sanciones contra México no serían aplicadas, incluyendo las de asistencia económica multi y bilateral.
La senadora Feinstein también ha insistido en que esta resolución incluya un texto que obligue a México a adoptar acciones en el futuro inmediato sobre rubros específicos, incluyendo extradiciones a Estados Unidos, el arresto de capos en particular y otras demandas.
Tres miembros de la Cámara de Representantes también tienen previsto presentar este martes en la Cámara baja otros proyectos legislativos en favor de la descertificación de México, entre los que se propone desde la descertificación plena hasta una descertificación con ``pase'' por razones de seguridad nacional.
Se espera que la Cámara baja apruebe esta legislación a nivel de comisiones en una semana, para después remitirla al pleno, donde sería sometida a un voto de aprobación.
El presidente de la Cámara, Newt Gingrich, declaró su oposición a la certificación de México el pasado fin de semana, y varios miembros del liderazgo de ambos partidos en la Cámara baja opinaron que una ley por la descertificación del país vecino muy probablemente será aprobada.
Gingrich y el líder de la mayoría en la Cámara de Representantes, Richard Armey, escribieron hoy una carta al presidente del Comité de Inteligencia de la Cámara solicitando una investigación sobre la ``catastrófica'' falla de la inteligencia estadunidense en detectar la corrupción en que incurrió el general Jesús Gutiérrez Rebollo, ex titular del Instituto Nacional para el Combate a las Drogas (INCD).
En una indicación de que podrían asumir un papel más vigoroso en el debate sobre los temas de la relación con México, los dos hombres más poderosos de la Cámara aseveraron en su carta: ``Queda claro que por lo menos en referencia a reducir el flujo de drogas a través de México hasta dentro de nuestras comunidades, el sistema de desarrollo de políticas y recaudación de inteligencia de la administración Clinton está quebrado''.
Un voto sobre estas resoluciones en el Congreso podría ser postergado hasta por dos semanas, pero los estrategas evaluaban este lunes la mejor ruta legislativa para llegar a un voto lo antes posible. El debate legislativo fue nutrido aún más por la noticia de que Humberto García Abrego había sido liberado por las autoridades mexicanas, y la senadora Feinstein dijo que ``sólo horas después del anuncio de la decisión por la certificación (de México), García Abrego salió caminando, como un hombre libre, del lugar donde se encontraba detenido por las autoridades''.
La senadora agregó ante el pleno de la Cámara alta: ``Esto es sólo un ejemplo del tipo de cooperación que Estados Unidos ha recibido de México en torno a la guerra contra la droga''. Uno de los ex asesores principales del presidente Bill Clinton, George Stephanopoulos, anticipó el pasado fin de semana que el Congreso sí logrará revertir la decisión de certificar a México adoptada por su ex jefe.
No obstante, la Casa Blanca ya inició su cabildeo contra la resolución para descertificar al vecino país, y un funcionario del gobierno de Clinton dijo que aún se piensa que la legislación podría ser bloqueada en el Senado. ``Estamos activamente trabajando contra el proyecto legislativo, eso empezó hoy'', comentó esta fuente.
Pero sobre México, como en tantos otros temas, esta administración suele adoptar una posición esquizofrénica y hoy, mientras funcionarios del Departamento de Estado promovían la oposición a la legislación, algunos de sus contrapartes de la DEA continuaban argumentando que México no ha trabajado eficazmente con Estados Unidos en la lucha contra el narco.
Evitando endosar la opción por la descertificación de forma explícita, se informó que funcionarios de la DEA alegan ante congresistas que México ha cooperado mínimamente en los esfuerzos antinarcóticos. ``La DEA considera que ahora está en poder de todas las cartas'', dijo tristemente un funcionario que apoyó la decisión a favor de la certificación y que estaba obviamente desalentado por el esfuerzo de cabildeo de la DEA.
La decisión a favor de la certificación recibió un fuerte respaldo por el Washington Post, que en su principal editorial de hoy argumentó que ``el presidente Clinton marcó una fina, pero sensata, raya entre la certificación de México y la descertificación de Colombia''.
El Post llamó a los congresistas estadunidenses a considerar las consecuencias de una descertificación de México sobre las relaciones bilaterales en comercio, inmigración y política ambiental, en los que las buenas relaciones, destacó, ``son vitales'' para los intereses de Estados Unidos.