La Jornada 31 de octubre de 1996

NOCHE DE ABUCHEOS Y LAMENTOS

Marlene Santos A. Los abucheos para los mexicanos y los aplausos y gritos de olé para los visitantes fue apenas la consecuencia lógica de lo sucedido en la cancha: México goleó 5-1 a los amateurs de San Vicente, pero no convenció a nadie y tuvo un rendimiento preocupante que provocó otra vez el ensordecedor grito de ``¡Fuera Bora!''

Durante los últimos 18 minutos de juego los cerca de 35 mil aficionados que asistieron al Azteca expresaron su malestar por el mediocre nivel mostrado. Ante la inocencia del rival, la goleada era una obligación y eso presionó a los mexicanos, que estuvieron muy nerviosos y fallaron una gran cantidad de oportunidades, además de padecer una gran fragilidad defensiva.

Gran parte de los asistentes buscó las salidas del estadio antes de tiempo y los que se quedaron sólo aprobaron las audacias del Brody Campos, que en varias ocasiones se atrevió a ir al frente, aunque sin mucho éxito.

Los aficionados apoyaron en principio al tricolor, pero poco a poco el Coloso de Santa Ursula se convirtió en el estadio de los lamentos ante tanta incapacidad para anotar. Al final el público se cansó de apoyar, aplaudió cualquier acción de los visitantes y abucheó a su propia selección.

Los goles fueron anotados por Benjamín Galindo (dos, a balón parado), Zague, Carlos Hermosillo y Ricardo Peláez.

En los números México se ubicó en el liderato del grupo tres, con 9 puntos, por 7 de Honduras y de Jamaica, mientras que San Vicente sigue sin puntos después de cuatro encuentros.

Más que un juego de futbol, aquello pareció un auténtico tiro al blanco. Como se esperaba, San Vicente fue un equipo ingenuo, y sin mayor idea de qué hacer en la cancha. Pese a ello, impulsado por el público, se sobrepuso a sus carencias y metió en aprietos a la zaga local, que resintió la ausencia de Claudio Suárez y hasta anotó el mejor gol de la noche.

Los mexicanos empezaron muy nerviosos. La primera muestra de esa presión fue apenas al minuto 4 y precisamente por conducto del veterano Galindo, quien sin marca y apenas afuera del área chica elevó su disparo.

En esos primeros minutos el Tri se acercó con una llegada de Zague que fue trabado dentro del área y un gol anulado a Hermosillo por dudoso fuera de juego.

Entonces llegó Benjamín Galindo con dos goles a balón parado. Al 19, en tiro libre, mostró su precisión de relojero, en un magnífico disparo al ángulo superior derecho, ante la inútil estirada del portero Melvin Andrews. Hasta antes de la anotación, Bora estuvo nervioso, levantándose y dando indicaciones.

Pero el 2-0 llegó al 28 y le dio una aparente tranquilidad. En una descolgada, Walker cometió penal sobre Ramón Ramírez, que aprovechó Galindo al engañar por abajo a la derecha al arquero.

Luego los mexicanos bajaron el ritmo y ya sólo tuvieron dos llegadas, por conducto de Hermosillo.

Ante el descontrol de los centrales Duilio Davino y Joel Sánchez, San Vicente tuvo dos llegadas, la más clara al 45, cuando Sam quedó solo ante Campos pero disparó desviado.

El Tri se fue al descanso con abucheos.

Apenas iban dos minutos del segundo tiempo y Zague falló una gran oportunidad ante el solitario portero. Pero un minuto después, al 48, Ramón robó el esférico y retrasó a Luis Roberto, quien fusiló por arriba para el 3-0.

Los mexicanos bajaron el ritmo y el juego fue nivelado, por lo que los aficionados empezaron a abuchear desde el minuto 72 y hasta el final del partido.

Carlos Hermosillo anotó el 4-0 al 73 y festejó en forma retadora. Después, el recién ingresado Ricardo Peláez falló dos claras ocasiones hasta que encontró un casual 5-0, en tiro que iba desviado pero que anotó el defensa Walker.

Ya sobre el final, Campos se animó a ir al frente y puso la nota alegre. Sin embargo, no bien había regresado a su marco cuando San Vicente anotó el mejor gol de la noche, por conducto de Randal Velox, en disparo de media distancia y a pase de taconcito. Fue el primer gol de San Vicente a México, que a su vez llegó a 28 anotaciones sobre los caribeños.