La Jornada 27 de octubre de 1996

A partir de hoy, horario de invierno

Este domingo el país retornó a su horario habitual, luego de que a las 2 de la madrugada fueron atrasados los relojes una hora para suspender el horario de verano.

Después de seis meses de que se dispuso el cambio de horario en todo el territorio, los mexicanos deberemos ajustar el ``reloj humano'' a las nuevas condiciones, pese al rechazo de algunos que consideran innecesario retrasar o adelantar el reloj, pues afirman que los beneficios de la medida son mínimos.

Las autoridades gubernamentales aseguraron que la aplicación del horario fue un éxito al reducirse el consumo de combustible, facturación en el pago de energía eléctrica y generación de la misma.

El 7 de abril, con el horario de verano las autoridades estimaron que ``con sólo adelantar el reloj una hora'', el país ahorraría el equivalente a mil 500 millones de pesos, gastan anual para la generación de un mil 300 kilowatts-hora-año.

Se consideró también que se dejarían de quemar cerca de 2 millones de barriles de combustible para generar electricidad.

La Comisión Federal de Electricidad indicó que el horario de verano permitió que se ``aplazara'' la construcción de una planta generadora de electricidad cuyo costo sería de 4 mil millones de pesos.

Después de seis meses de que fue adelantado el reloj una hora, persiste el escepticismo de muchos capitalinos respecto de los beneficios reales de la medida.

``Para qué cambiaron el horario, nos levantamos todavía de noche y tenemos que prender la luz más temprano. Dicen que se ahorró energía, pero yo sigo pagando lo mismo y aun más por la luz'', señalan.

Otros sostienen que la aplicación del horario de verano es factible en países europeos o en Estados Unidos, donde se diferencian perfectamente las cuatro estaciones del año y al adelantar el reloj una hora el día se vuelve efectivamente ``más largo'' y en invierno, al atrasarlo, se logra ``alargar el día''.

Lo cierto es que, independientemente de que se adelantó la hora el 7 de abril pasado, transcurrieron varios días para que el organismo se acostumbrara al nuevo horario. Eran frecuentes las quejas de que la gente tenía sueño o que no podía dormir a la hora acostumbrada.

Sin embargo, este domingo, con la entrada del horario de invierno resultará más fácil para la población dormir una hora más y adaptarse al nuevo horario, que en abril pasado, cuando se adelantó el reloj una hora y la gente tenía la percepción de que le habían robado ese tiempo.