Conchello: AN no debe descartar candidatos externos
Alonso Urrutia Senador por el Distrito Federal y ex dirigente nacional y capitalino del PAN, José Angel Conchello dice: ``La elección de 1997 es un momento crucial para el PAN en el Distrito Federal, es la prueba de fuego para el año 2000''. Sin embargo, advierte, ``el triunfo es mas preocupante que la derrota''.
En su perspectiva están las desgastantes experiencias de los gobiernos panistas en las grandes ciudades, catalizadores de huelgas y protestas artificiales, que han obligado a las gestiones locales a abocarse a la solución de estos problemas durante los primeros años de gestión.
Bajo esta lógica, Conchello sostiene que el partido debe analizar varias actitudes, incluida la posibilidad de impulsar a un candidato externo que sea menos vulnerable a actitudes de ``revanchismo'' del PRI.
``Conociendo al PRI y al gobierno, pueden ensañarse contra un regente panista y hacerlo trizas a base de huelgas de pepenadores, de locatarios, de policías, como represalia por haber perdido, pero con un candidato ciudadano la población va a entender que se trata de una revancha de un partido que se niega a entregar el poder''.
``No podemos cerrarnos al análisis de una candidatura externa; aunque los nombres de los posibles candidatos a jefe de gobierno en la ciudad son buenos podemos buscar mejores''.
Carlos Castillo Peraza, Francisco José Paoli, Gonzalo Altamirano Dimas e incluso el propio Conchello son algunos de los nombres que suenan al interior del PAN.
--¿Usted aspira a la candidatura?
--Yo me descarto. Les dejo la posibilidad a otros de participar. En este momento me preocupan asuntos como la petroquímica --que me tiene sorbido el seso--, la ley de derechos de autor, la ley forestal, todas inclinadas a una política entreguista del gobierno que en este momento son las cosas más peligrosas del gobierno que debemos combatir.
Dirigente capitalino de 1987 a 1993 y en su momento opositor a la incorporación de sectores empresariales al partido, Conchello señala que hay tres opciones: analizar las candidaturas internas; buscar una posible alianza con el PRD --aunque Cárdenas parece haberla cancelado porque quiere que nos adhiramos a él-- o una candidatura externa.
Al abundar en este último caso, Conchello dice que primero ``debería haber el consenso en el PAN y luego preguntárselo a la ciudadanía para ver si acepta que Acción Nacional contienda con una candidtura externa''.
Si se logra --dice el senador-- el siguiente paso es trazar el perfil la fisonomía del candidato: honradez a toda prueba; no tener militancia política-partidista en los últimos cinco años; demostrada imparcialidad en materia político electoral.
--¿Es una postura no muy común en el PAN?
--No, no lo es, pero hay una diferencia: es una elección municipal y en este ámbito sí hemos tenidos experiencias de alianzas con otras fuerzas.
--¿No es muy relativo que sea municipal? Es una ciudad enorme y con gran impacto político.
--Pero los problemas son de orden administrativo municipal, no son de ideología. No lo recomiendo para senadores y diputados porque ahí sí hay cuestiones ideológicas. Aquí se trata de resolver cuestiones administrativas, aunque sea de una las ciudades más grandes del mundo.
--Mencionaba que para el PAN es crucial la elección de 1997. ¿Cómo pensar en una candidatura externa?
--Porque el gobierno puede ensañarse con un regente del PAN y hacerlo trizas a base de huelgas. Lo puede hacer garras en seis meses. Imagínese una ciudad con una huelga de recogedores de basura en un mes. Sería el basurero más grande del mundo. Eso ha pasado en todas las grandes ciudades que hemos ganado.
``Después se acostumbran, pero sabiendo que esto es el preludio de la elección presidencial del año 2000 qué mejor que desprestigiar a un regente del PAN para pregonar que no sirve votar por el PAN, para desgastar al Partido Acción Nacional. Es tan clave esto que puede ser crucial para el 2000. El triunfo es más preocupante que la derrota''
--¿Cuál es la principal herencia priísta a un eventual gobierno de oposición en la ciudad?
--La corrupción. Esta es la causa de la falta de seguridad, de buen transporte, de la lentitud en los servicios. Detrás de todo eso está la actitud del gobierno de solapar a un grupo de poder que está con ellos