La Jornada 22 de octubre de 1996

Plantea la Ssa declarar la fase 1 en 225 imecas

Rosa Elvira Vargas, Laura Gómez y Roberto Garduño Especialistas y autoridades de la Secretaría de Salud se manifestaron por disminuir el número de puntos imecas para declarar la Fase 1 del Programa de Contingencia Ambiental y evitar al máximo las enfermedades respiratorias a los habitantes de la ciudad de México, principalmente los niños.

El subsecretario de Regulación Sanitaria de la Ssa, Rafael Camacho Solís, propuso fijar en 225 puntos el límite para decretar la emergencia ambiental, y el director del Hospital General de México, Horacio Rubio Monteverde, recomendó 200 puntos.

Sin embargo, Eduardo Palazuelos, secretario del Medio Ambiente del Departamento del Distrito Federal (DDF), indicó que no hay, por el momento, datos epidemiológicos que supongan una pronta revisión en los niveles de contaminación que obliguen a decretar la contingencia ambiental, pero admitió que corresponde a la Ssa una decisión de este tipo.

Por otra parte, la Secretaría de Educación Pública canceló ayer las actividades al aire libre en las escuelas localizadas en el suroeste de esta capital, luego de que a las 14 horas el índice Imeca se situó en 236 puntos. Además, ordenó que hasta en tanto el ozono no registre menos de 200 puntos no se realizará la formación de entrada y salida de clases y están suspendidos los actos cívicos, recreativos, deportivos y culturales a la intemperie. Tal disposición rige para los Centros de Desarrollo Infantil (Cendis) y planteles de prescolar, primaria, secundaria y educación especial.

El titular de la SEP, Miguel Limón Rojas, interrogado por enésima vez sobre la posibilidad de modificar el calendario escolar debido a los altos niveles de contaminación, dijo que éste no es un problema que deba resolver el sistema educativo, sino que demanda gran cantidad de medidas en conjunto.

Insistió en que la infición rebasa una estación del año y va mucho más allá de lo que podría ser el invierno, por lo que suspender clases en diciembre y enero, como se ha propuesto, ``no resolvería el problema''.

Un tanto exasperado por la reiteración del tema calendario escolar-contaminación, Limón Rojas dijo que ``aun modificando el almanaque escolar habría muchos problemas de contaminación y de contingencia en otros meses distintos a enero y febrero. Entonces ¿tendríamos que suspender las clases de septiembre a marzo, por ejemplo? y aun así, probablemente en abril y después en septiembre tendríamos otros días también muy críticos''.

En consecuencia, indicó, modificar el calendario no tendría la utilidad que mucha gente piensa, ``porque lo señalan sin entrar al análisis que nosotros hemos nos hemos visto obligados a llevar a cabo para sostener esta posición''.

Camacho Solís señaló que en la próxima reunión de la Comisión Ambiental Metropolitana se analizará la viabilidad de disminuir a 225 puntos la norma para declarar la emergencia ambiental. Indicó que a partir del uso extensivo de las gasolinas reformuladas se han reducido los niveles de plomo pero se han elevado los de otros contaminantes, por lo que la tarea a corto plazo es atender de manera global el problema.

Expuso que no se ha detectado un cambio de patrón en las enfermedades respiratorias, pero que esto podrá ubicarse con toda claridad en la próxima temporada invernal.

Eduardo Palazuelos señaló que dos días arriba de los 250 puntos imecas marca un incremento muy sensible y estadísticamente muy significativo para el sistema respiratorio de los habitantes de la ciudad.

Indicó que aunque hasta el momento los mecanismos aplicados por las autoridades para combatir el fenómeno han dado resultados satisfactorios, ``debemos estar preparados para cualquier contingencia''.