La Jornada 17 de octubre de 1996

ANTICELEBRACION

Marlene Santos A. Más de 100 mil aficionados asistieron al estadio Azteca para observar una goleada de México sobre Jamaica, pero al final la fiesta terminó con abucheos y aires de decepción.

La selección nacional se impuso con muchos problemas por 2-1 a Jamaica, pero su rendimiento deja muchas dudas sobre el futuro. No sólo por las múltiples fallas ante la portería rival, sino sobre todo porque el equipo fue una nulidad en el segundo tiempo: con una defensa incierta, una media sin idea y unos delanteros con miedo (incapacidad) para anotar.

Gris debut del Tri, en México, rumbo al Mundial de Francia 98, con lo que quedó demostrado que eso de ser el gigante de la Concacaf más bien parece una burla. Cada visita de los equipos del Caribe era una goleada segura en canchas mexicanas y anoche --en los últimos minutos-- los mexicanos de plano se retrasaron para defender su mínima victoria.

En cuanto a los números, México suma 6 puntos, mismos que tienen Jamaica (ambos con igual diferencia de goles) y Honduras, mientras que San Vicente no lleva unidades. El Tri no mejoró ni con la inclusión de los veteranos y tan sólo Zague se salvó de la mediocridad.

Los goles fueron anotados por Zague y Carlos Hermosillo, mientras que Walter Boyd confirmó ser el más peligroso de los visitantes, al anotar en la única llegada con claridad que tuvo su equipo.

Los mexicanos iniciaron con entusiasmo y no transcurría ni el primer minuto cuando Alfaro estrelló su remate de cabeza en el travesaño.

Ese fue el principio de múltiples fallas: al 8, Hermosillo evadió al portero y tiró rasante, pero el veloz zaguero Dixon desvió con una barrida; al 17, Hermosillo tiró desviado, cuando estaba sin marca y en los límites del área chica; al 22 y al 30, disparos elevados de Enrique Alfaro; al 43, remate al poste por conducto de Zague; al 45, disparo de García Aspe a las manos del portero Warren Barret.

Y ya en tiempo de compensación, Galindo mandó un centro que Hermosillo prolongó de cabeza y Zague dejó botar y se lanzó para rematar de volea y vencer por arriba a Barret.

En toda la primera mitad, Jorge Campos no fue exigido en tiro directo.

Apenas inciaba el segundo cuando, a gran pase de Galindo, Alfaro remató muy elevado. Pero las cosas parecieron componerse a los 55, en un corner de Galindo que Hermosillo remató de cabeza y el portero Warren nada pudo hacer porque fue estorbado por Alfaro. Era el 2-0 que presagiaba la goleada, pero poco a poco los mexicanos perdieron fuerza y ya sólo tuvieron remates de Hermosillo y Claudio Suárez.

Y cuando la situación era nivelada, Boyd aprovechó una duda de la defensa, tomó el esférico por la entrada al área, se benefició con un resbalón de García Aspe y tiró a media altura a la izquierda de Campos, quien alcanzó a tocar pero no detuvo.

Bora intentó enderezar la nave: Damián Alvarez por Alfaro (al 74), Luis García por Galindo (80) y Ricardo Peláez por Hermosillo (86). Pero nada cambió. México siguió siendo un equipo luchón y de entrega, pero sin calidad, corriendo sin sentido y ya desesperados y presionados por la raquítica victoria.

Al final, el público los premió con un abucheo que era el reflejo de una frustración más en el futbol, cuando todo estaba preparado para una goleada.

México jugó con Campos; Pardo, Suárez, Davino y Ramón Ramírez; Bernal, Galindo (Luis García), García Aspe y Alfaro (Alvarez); Hermosillo (Peláez) y Zague.

Regular trabajo del silbante trinitario Ramesh Ramdhan.