Tercer día de cerco militar a la casa de un comerciante en Guerrero

De la Corresponsalía. Chilpancingo, Gro., 16 de octubre Un centenar de soldados mantiene desde este lunes un cerco militar a un domicilio particular de la comunidad de Buenavista de Cuéllar, perteneciente a este municipio, donde retienen al comerciante Andrés Sánchez Aguilar, a su esposa Marlene Mier Barrientos, a su hijo de dos años Brian Sánchez y a su madre Margarita Aguilar Reyna sin explicarles el motivo por el cual los privan de de su libertad.

La Comisión Nacional de Derechos Humanos (CNDH) integró esta tarde el expediente 96/6733 y designó a Manuel Acosta Ramírez para investigar los hechos en respuesta a la queja que enviaron hoy José Guadalupe Estrada Aguilar, medio hermano de Sánchez Aguilar, y del abogado José María Gómez Caña.

Afuera de la propiedad sitiada, un predio de tres hectáreas, grupos de soldados que hacen guardias y rondines alrededor del terreno se retiraron repentinamente a la llegada de los periodistas, lo mismo que dos camiones del Ejército Mexicano que sirven para transportar a los militares.

Sin embargo, un teniente, un subteniente y un sargento advirtieron a Sánchez Aguilar que tienen órdenes de vigilar la propiedad y de impedir que él y sus familiares abandonen su casa. En entrevista con varios reporteros que tuvieron acceso a la propiedad, el comerciante aseveró que no ha recibido ninguna explicación y que los mandos castrenses únicamente le dijeron que están esperando una orden de cateo.

Afirmó que se dedica al comercio de la jamaica, semillas de calabaza, pieles de chivo y otros productos y que en los tres días que lleva detenido en su domicilio ha tenido pérdidas económicas por no poder transportar la carga a la central de abastos del Distrito Federal.

El abogado Gómez Caña interpuso hoy un amparo ante el Juzgado Primero de Distrito para proteger a la familia ``secuestrada por el Ejército'' de la eventualidad de una detención y de cualquier procedimiento legal por parte de la Procuraduría General de la República y de la 35 Zona Militar con sede en Chilpancingo.

``El Ejército Mexicano está para salvaguardar la soberanía y no tiene ninguna facultad para privar ilegalmente de su libertad a esta familia, están cometiendo graves delitos del orden común como secuestro y abuso de autoridad'', indicó Gómez Caña.

Dijo que el teléfono instalado en la propiedad cercada estuvo bloqueado el lunes y parte del martes y que apenas esta madrugada los detenidos pudieron comunicarse con otros familiares para informar de su situación.

Agregó que solicitó información al teniente encargado del operativo y le dio a conocer que la familia está dispuesta a permitir un cateo a su terreno, pero el militar sólo le respondió que tenían órdenes superiores de permanecer en guardia y no dejar salir a los cuatro habitantes.

La actuaria del Juzgado Primero de Distrito, Guadalupe García Peralta, acudió esta tarde a Buenavista de Cuéllar para solicitar al comerciante Sánchez Aguilar, su esposa embarazada, su pequeño hijo y su madre que ratificaran la solicitud de amparo y afirmó que dicho juzgado federal solicitará a las autoridades de la 35 Zona Militar y de la delegación de la PGR que a más tardar en un plazo de 24 horas informen cuál es la razón del sitio a la propiedad y de la privación de la libertad de sus ocupantes.