La Jornada 12 de octubre de 1996

Pide Zedillo apoyo a líderes de PRI, PAN y PRD para concluir la reforma

Roberto Garduño, enviado, Ensenada, BC, 11 de octubre El presidente Ernesto Zedillo confió en que el país seguirá contando con la voluntad de los partidos para dar los pasos necesarios que completen la reforma electoral federal. Al compartir la mesa con los dirigentes del PAN, PRD y PRI, el jefe del Ejecutivo externó que la democracia es la base más firme de la estabilidad política, de respeto a la voluntad ciudadana y de legítima autoridad y ejercicio de poder.

``Con la suma permanente y el respeto habremos de perseverar para que la democracia sea la norma de conducta política que sustente la convivencia civilizada y la expresión de nuestra pluralidad. Habremos de perseverar hasta que la democracia plena sea la base política del crecimiento económico y de una vida social armónica, regida por los derechos, los deberes, el respeto y la civilidad'', expuso.

El mandatario se trasladó ayer por la tarde a Ensenada, Baja California, para clausurar la 69 Asamblea Nacional Ordinaria de la Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex), donde se encontró con Andrés Manuel López Obrador, Felipe Calderón Hinojosa y Santiago Oñate, y sus respectivas esposas. En la mesa semirectangular también estuvo el gobernador Héctor Terán Terán y el empresario Carlos Abascal.

Este último, grandilocuente, reclamó que ya es tiempo de dejar atrás el discurso de la crisis, porque ``estamos viviendo la oportunidad de cambiar sin revolución, sin asonada. Ya llegó, señores, el tiempo de la reconciliación nacional.''

El mejor momento de su intervención fue con el tema de los casinos, y sobre el cual mostró un marcado rechazo: ``Es el espejismo de una ganancia fácil que sólo beneficiaría a unos cuantos''.

La referencia a esos centros levantó un prolongado aplauso de los empresarios. López Obrador, Santiago Oñate y Felipe Calderón sólo cruzaron miradas.

Después, el presidente Zedillo recordó que su gobierno perseverará en las reformas estructurales que conduzcan a una economía más eficiente y competitiva. También declaró que es su ``convicción'' profunda que la economía de mercado de ninguna manera significará el relajamiento de las resposabilidades sociales del Estado.

Les dijo a los dirigentes políticos y patronales que la pobreza y la desigualdad se van a vencer contruyendo una plena democracia, fomentando una sólida economía de mercado e impulsando políticas sociales a la vez responsables y ambiciosas.

Al dirigirse a los líderes del PAN, el PRD y el PRI, el mandatario resaltó que el país necesita de su voluntad, porque comparten la convicción ``y la decisión de lograr, mediante el diálogo y el respeto, los consensos necesarios para fortalecer nuestras instituciones y prácticas democráticas''